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La dinámica favorable que tuvo el sector agropecuario colombiano en el primer trimestre de este año, al observar un crecimiento de un 3,3 %, estaría amenazada por las manifestaciones sociales que se iniciaron hace casi un mes.
Así lo consideran los analistas del sector agroindustrial del Grupo Bancolombia, encabezados por Jhon Fredy Escobar, quienes advirtieron que los bloqueos en las vías del país podrían tener un impacto más allá del corto plazo sobre las actividades del campo.
Los efectos que muy posiblemente se observarían en el agro a partir de la situación por la que atraviesa el país estarían en varios frentes: pérdidas de producto, en el caso de perecederos; aumentos de los costos logísticos entre puertos, plantas de procesamiento y centros de consumo; encarecimiento de insumos; dificultades para garantizar la mano de obra en labores de campo, y demoras en la entrega de productos a los clientes, tanto a nivel local como internacional (ver Para saber más).
“Este último punto es posiblemente el que podría tener un impacto más duradero en el tiempo. No podemos perder de vista que el país viene desarrollando una oferta exportable más diversa, en la cual, además de la calidad del producto, está en juego la puntualidad y cumplimiento en la entrega a los distribuidores y comercializadores en el exterior, activo intangible de gran valor, especialmente para las cadenas agroexportadoras que apenas están emergiendo”, anotaron los expertos de Bancolombia.
El informe sobre el comportamiento del Producto Interno Bruto (PIB) entre enero y marzo, publicado por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) a mediados de este mes, detalló que en el agro sobresalieron los crecimientos del café en 21,4 %; silvicultura y extracción de madera en 5 %; ganadería en 2,7 %; y la agricultura (sin café) en 2 %.
Específicamente se reportaron incrementos en la producción de cultivos como cacao (47 %), fríjol (22,8 %), café pergamino (19 %), yuca (14,2 %), flores (13,5 %), leche (8,8 %), arroz (8,2 %), así como en la producción de huevo (7,9 %), hortalizas (3,3 %), ganado bovino (2,8 %), ganado porcino (2,8 %) y frutas (0,7 %).
Esos desempeños contribuyeron con el dato positivo de los tres primeros meses de este 2020 del sector agropecuario (3,3 %), acumulando así cinco años consecutivos de variaciones anuales positivas en el PIB del primer trimestre, con un promedio aritmético del 4,5 %.
Desde la gerencia de la Federación Nacional de Cafeteros, Roberto Vélez, resaltó que este sector creciera 6,4 veces el PIB agropecuario y 19,4 veces el PIB nacional (1,1 % a marzo).
“Ya en otras ocasiones hemos subrayado que el café es motor clave de la economía colombiana, pero estas cifras lo confirman de manera contundente y hoy más que nunca debemos seguir trabajando para ayudar al crecimiento social y económico del país”, expresó el dirigente gremial.
Igualmente, insistió en la importancia de que los productores del grano puedan seguir recogiendo la cosecha, cuyo valor en 2020 alcanzó los 9 billones de pesos, y llevarla a los puntos de venta sin el traumatismo que representan los bloqueos de vías o la escasez de insumos o combustibles en la actual coyuntura.
Por su parte, desde el Centro de Estudios de Anif se indico que las perspectivas del sector cafetero son buenas, pues en abril continuaron las variaciones positivas, particularmente en las exportaciones que superaron la variación anual de 61 % (no visto desde principios de la década de 1990).
En el cuarto mes de este 2021 los despachos del grano a los mercados externos sumaron 1,03 millones de sacos de 60 kilos, cifra mayor a los 642.000 sacos enviados en abril de 2020, durante el primer mes de restricciones por la pandemia en Colombia.
Los investigadores del sector agroindustrial de Bancolombia explicaron que aunque usualmente se hace referencia solamente a la Tasa Representativa del Mercado (TRM) del dólar para analizar la competitividad de las exportaciones desde el frente cambiario, es importante considerar adicionalmente las diferencias entre la inflación local y la de los socios comerciales.
“Un aumento del 9,5 % en este índice en 2020 nos permite pensar en una mayor competitividad de las exportaciones colombianas para este año, especialmente hacia Estados Unidos, donde la inflación anual a abril pasado estuvo en 4,2 %, por encima de la de Colombia, con 1,95 %”, señalaron.
También mencionaron que este año ha mostrado una recuperación más rápida de lo esperado en el mercado de flores estadounidense. Es así como las cifras de importación de flores en ese país desde Colombia muestran un aumento del 22 % a marzo de este año.
Otro aspecto que se debe considerar es el hecho de que las tormentas tropicales del año pasado en Centroamérica le pasan factura a las exportaciones de banano de esa región.
Según los investigadores de Bancolombia, las cifras de exportación de banano de Guatemala y Honduras hacia Estados Unidos dan muestra del impacto de esos fenómenos naturales, con caídas en volumen a marzo de este año del 12 % y 56 %, respectivamente.
Aun cuando en el agregado las importaciones de Estados Unidos caen 4 %, este espacio de mercado lo han aprovechado Panamá, Costa Rica, Ecuador y Colombia, con crecimientos en exportación a dicho destino del 124 %, 19 %, 14 % y 13 %, respectivamente.
Los cítricos, en especial el limón Tahití y la naranja, siguen creciendo a paso acelerado. Las cifras de exportación en toneladas a marzo de este año del DANE muestran una subida del 72 % para el limón Tahití y del 16 % para la naranja, después de haber crecido a dos dígitos en 2020.
Adicionalmente, Colombia debería seguir escalando posiciones en el escalafón de exportadores de aguacate. Bancolombia estima que en los próximos cinco años la oferta global de esta fruta crezca levemente por encima de la demanda, y a partir de ese momento, hasta 2035, el mercado alcanzaría un mayor equilibrio