CoreX tomó oficialmente las riendas de Cerro Matoso. El cambio de control se concretó luego de cumplirse todas las etapas, condiciones legales y regulatorias necesarias para la transferencia de la operación. Con este hito, se cierra de manera definitiva la etapa de Cerro Matoso bajo la propiedad de South32 y comienza una nueva fase con la llegada de CoreX como nuevo dueño.
El presidente de Cerro Matoso, Ricardo Gaviria, aseguró que este cambio permitirá fortalecer a la compañía y explorar nuevas oportunidades de crecimiento. “Con este cambio seguiremos consolidando la compañía y estudiando oportunidades futuras que puedan transformar la empresa y nos permitan continuar aportando al desarrollo y a la generación de valor en el territorio, al tiempo que como equipo enfrentamos con determinación los desafíos actuales, especialmente en materia de precios y reducción de nuestros volúmenes”, afirmó en un comunicado.
CoreX es un conglomerado industrial global, integrado verticalmente, fundado en 2024 por Robert Yüksel Yildirim. La compañía opera en los sectores de metales y minería, puertos y terminales, energías renovables, transporte marítimo y logística, infraestructura y construcción, productos químicos, comercio internacional, inversiones financieras y capital de riesgo.
Actualmente, CoreX tiene presencia en 55 países y emplea a más de 20.000 personas en todo el mundo. Su División de Metales y Minería es líder mundial en la minería de cromita y en la producción de ferrocromo con alto contenido de carbono.
Además, la empresa mantiene una estrategia enfocada en fortalecer su presencia en el mercado global del níquel. Entre sus activos se encuentran la adquisición de Compagnie Miniere Du Bafing en Costa de Marfil, así como la propiedad de Golden Eagle Nickel en Macedonia del Norte y NewCo Ferronikeli en la República de Kosovo.
La apuesta de CoreX por el níquel y por Colombia
El fundador, presidente y director ejecutivo de CoreX, Robert Yüksel Yildirim, afirmó que la compra de Cerro Matoso es una pieza clave en la estrategia global de la compañía. “La adquisición de Cerro Matoso representa un paso significativo en nuestra estrategia para el níquel, posicionando a CoreX como un proveedor totalmente integrado y confiable para la industria mundial del níquel. Con operaciones en 55 países en cinco continentes y más de 20.000 empleados, crecemos con propósito, guiados por nuestros valores de integridad y colaboración”, señaló.
Yildirim también destacó el compromiso de la empresa con las comunidades y los grupos de interés. “Creemos en la equidad, la confiabilidad y en apoyar a las comunidades vecinas. Esperamos trabajar de cerca con el equipo de Cerro Matoso, las comunidades locales y otros grupos de interés para asegurar una transición fluida y exitosa”, agregó.
Cerro Matoso, ahora bajo la dirección de CoreX, ratificó su compromiso con la seguridad, la salud y la integridad de sus empleados, contratistas y de toda la operación. Asimismo, continuará cumpliendo con los compromisos legales, sociales y ambientales adquiridos en el territorio.
Con la llegada del nuevo propietario, la compañía seguirá realizando aportes a la economía local y nacional, así como al bienestar de los trabajadores y de las comunidades vecinas. Actualmente, más de 50.000 personas se benefician directa e indirectamente de su operación.
Cerro Matoso insistió en que mantiene un relacionamiento cercano con 25 comunidades vecinas, con las que ha ejecutado más de 400 proyectos sociales enfocados en acceso a tierras, mejoramiento de viviendas, educación y proyectos productivos, entre otros. Estas iniciativas han contribuido de forma significativa a la reducción de la pobreza en la zona de influencia de la operación.
La empresa reiteró que seguirá enfocada en mantener una operación segura, estable y eficiente, cumpliendo con sus metas de producción y con la optimización de costos, sin dejar de lado su responsabilidad social en el territorio.
Un impulso para la competitividad y el desarrollo regional.
El cambio de control de Cerro Matoso representa un paso clave para fortalecer su competitividad, asegurar su sostenibilidad a largo plazo y continuar aportando al desarrollo económico del departamento de Córdoba y de Colombia.
Con el respaldo de un conglomerado global como CoreX, la compañía entra en una nueva etapa marcada por los retos del mercado internacional del níquel, pero también por oportunidades de crecimiento, inversión y generación de valor para la región y el país.