López Obrador traza una autorevocatoria del mandato en México

Andrés Manuel López Obrador convocó a su propia revocatoria del mandato en México. FOTO: EFE

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, enfrentará una revocatoria del mandato convocada por él mismo, para que los electores decidan si quieren que termine su periodo presidencial, que es de seis años y culminaría en 2024.

La idea de llamar a un proceso en las urnas para definir sobre su propia administración comenzó a barajearse desde la campaña. Según el mandatario, los ciudadanos, así como tienen el derecho a elegir al Ejecutivo, deben tener la potestad de dar por terminado su periodo antes de lo previsto, si así lo desean.

En un país en el que el discurso de la “soberanía” lleva tres años retumbando en el Palacio Nacional, López Obrador considera que el pueblo debe ser “soberano” para definir si quiere mantener en el poder al político que eligió en las presidenciales.

Por eso, desde septiembre de 2020 tramitó la Ley Federal de Revocación de Mandato que tiene como objeto reglamentar el artículo 35 de la Constitución, que habla de la revocación del mandato al titular de la Presidencia y abonó terreno para este y otros procesos de ese tipo en el futuro.

Y es que la premisa del izquierdista es que las revocatorias deben institucionalizarse como un método democrático para que “se acote el poder presidencial, que nadie se sienta absoluto, que si un presidente actúa bien pueda continuar y, si actúa mal, se pueda retirar por la vía pacífica”.

El Instituto Nacional Electoral (INE) avaló 2,75 millones de firmas que fueron recogidas por los grupos simpatizantes de López Obrador. Estas superaron el 3 % requerido en 21 entidades territoriales del país, del mínimo de 17 que pedía la norma.

Aunque el requisito ya está, la realización de la revocatoria al presidente de México está en duda porque el INE dice no tener presupuesto para efectuar la jornada en todo el país. Esa afirmación choca con el plan de austeridad del Ejecutivo, que redujo los fondos para una serie de partidas del gasto del Estado, incluidas las cuestiones de la entidad que debería llamar a las urnas.

Esta semana el INE dijo que no puede realizar la consulta porque el Congreso le recortó 4.913 millones de pesos mexicanos (242 millones de dólares) para 2022. En línea con ese proyecto, el Gobierno presentó otro proyecto que para que esa entidad ahorre 2.972 millones de pesos mexicanos (más de 146 millones de dólares).

Pero Andrés Manuel López Obrador insiste en que sí hay capacidades institucionales para efectuar la revocatoria. “Si se hace un esfuerzo de parte de los consejeros del INE se puede llevar a cabo la consulta, que es muy importante, es algo bueno y ejemplar, tiene que ver con la democracia participativa, para que el pueblo tenga siempre las riendas del poder en sus manos”, consideró el mandatario.

Según el INE, es necesario esperar que la Secretaría de Hacienda responda su solicitud de una ampliación presupuestaria por 1.738 millones de pesos (unos 85 millones de dólares) para poder tener los fondos que se requieren para la consulta. Ese requerimiento llegaría, a más tardar, el 31 de enero.

Con todo esto, el calendario electoral de Latinoamérica suma otra revocatoria del mandato en la agenda, que junto a la que convocó la oposición de Venezuela contra Nicolás Maduro promete mover a los ciudadanos en las urnas.