"Soy un arquero al mismo nivel que mis compañeros". Con esa seguridad y personalidad habla Luis Herney Vásquez, el portero juvenil de 18 años al que le tocó debutar con el Medellín ante el Cali tras la lesión de Carlos Bejarano y quien no se siente inferior al reto de continuar en la portería escarlata.
"Tuve sentimientos muy lindos, se me pasó por la cabeza que no podía entrar con miedo ni nervioso a la cancha, porque me he esforzado durante 10 años, en los que me sacrifiqué y superé momentos difíciles".
Luis Herney se crió en el seno de una familia humilde, en Florida (Valle). Su madre, Rocío Caicedo, siempre lo apoyó sin importar que el sueño de su hijo significara alejarse de ella. "Soy el mayor de la casa, tengo una hermana de 15 años, Jenifer Sofía y un hermano de 12, Cristian Julián. Separarme de ellos fue muy difícil porque mi mamá trabaja fuera de la ciudad y yo los cuidaba. Ahora ellos quedan solos".
Dice que si no hubiera sido futbolista estaría estudiando contabilidad. Sin embargo, sabe que aún es muy joven y todavía tiene esa opción. Pero por ahora quiere aprovechar la oportunidad que le está dando el Medellín porque asegura que si no lo hace, puede que no le llegue otra.
"Venía trabajando para cuando me tocara y llegó el momento. Antes de todos los partidos hay nervios. Jugador que no los sienta está equivocado de profesión, pero cuando estás en la cancha tienen que desaparecer y confiar en tus capacidades".
En Colombia es admirador de su compañero Leandro Castellanos y, en el fútbol internacional, dice que del portero alemán Manuel Neuer.
"Leo me aconseja desde que estoy acá y además de ser un excelente profesional, lo valoro mucho por la forma en que me trata".
Cuando se le preguntan por sus características no duda en mencionarlas. Y, al ser tan joven, llama la atención que hable de su voz de mando: "soy un arquero que primero ordena su defensa y a su equipo, tengo buen juego aéreo y soy rápido en el achique. Cuando entré contra el Cali les dije a mis compañeros que estuvieran tranquilos, que pensaran que en el arco estaban Leandro o Bejarano, que iba a hacer lo que yo sé y no me iba a poner a inventar".
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