Ha sido un año de muy buenos réditos para Robert Farah en el circuito mundial. Junto a su “hermano”, Juan Sebastián Cabal, se ha coronado campeón en Buenos Aires, Río de Janeiro y Niza (Francia).
Además, ocupa el sexto lugar de la carrera al Torneo de Maestros en Londres en dobles y es 28 del mundo en el ranquin de esta modalidad.
Como si fuera poco, acaba de clasificar a la final de dobles mixtos con Anna-Lena Groenefeld, que jugará hoy ante Henri Kontinen y Heather Wartson (8:00 a.m.)
Y, para rematar, fue confirmado como uno de los dos tenistas criollos que estarán en los Juegos Olímpicos (el otro es Cabal).
Sobre estas alegrías y los retos que se avecinan en el calendario, una de las principales raquetas criollas de la historia dialogó con este diario.
¿Qué sensación deja la participación que ha tenido en este Wimbledon?
“Unas sensaciones muy buenas, siempre es bueno ganar partido, especialmente en estos torneos, pero hay muchas cosas por mejorar. Vamos a intentar ejecutar mejoras en los próximos retos y esperamos que las cosas nos salgan bien”.
¿Cuáles son las expectativas para lo que viene?
“Son las mismas de siempre, tratar de ganar la mayor cantidad de juegos posibles. Por ahora, vamos partido por partido y concentrándonos en cada paso”.
Junto con Sebastián han tenido un año plagado de tres títulos en ATP, ¿cuál ha sido la clave de esto?
“Creo que estamos jugando muy bien, venimos en un gran momento, con gran momento tenístico, y bueno, la clave de este año ha sido trabajar duro y seguir confiando en el proceso que llevamos”.
¿Cómo es la relación por fuera de la cancha?, ¿cómo es el tema motivación?
“La relación de mucha amistad, casi de familia. La motivación es continua, siempre tratamos de motivarnos lo más que podamos en las situaciones más difíciles del partido”.
Dicen que ambos son complementarios, ¿cuáles son las características de uno y otro?
“Los dos nos complementamos muy bien. Sebas es una persona más tranquila, más relajada. Yo soy más enérgico. Entonces cuando él baja su ánimo, yo lo subo; y cuando yo estoy muy arriba, él me baja el ánimo”.
Son sus primeros Juegos Olímpicos, ¿cómo se siente de cara a este reto?
“La verdad es que es un sueño hecho realidad. Es algo que siempre he querido hacer en mi vida, jugar unos Olímpicos, y, ahora que se convirtió en realidad, solo espero llegar en mi mejor momento, bien de salud y bien motivado para enfrentar este reto, que ha sido algo que quiero hacer en mi vida”.
¿Cómo visualiza el encuentro de Copa Davis ante Chile?
“Va a ser un equipo bastante difícil, ganar en su casa va a ser muy duro porque traen unos jóvenes que están haciendo muy bien las cosas, que poco a poco suben en el escalafón mundial. Tienen un grupo muy compacto, y nos va tocar estar muy bien, muy unidos y comprometidos, y mostrar un buen nivel en la cancha”.
¿Cómo llegar a la cima en el ranquin mundial?
“Dicen que lo más difícil no es llegar a la cima, sino sostenerse. Pero yo no creo que hayamos llegado, aún falta mucho, todavía toca progresar en muchas cosas, mejorar mucho en constancia de resultados para llegar allá. La cima es llegar a ser el número uno a nivel mundial y nos preparamos cada día para eso”
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