“Rumbo a demostrar lo que mejor sé hacer, próxima parada, Lausana”, ese es el último mensaje que publicó Caterine Ibargüen en su cuenta de Facebook, donde además, con una selfie en la que se ve sonriendo, delata tranquilidad y confianza, de cara, quizás, a su primer gran examen de 2019.
No quiere decir que las competencias anteriores hayan sido menos importantes, pero en la que intervendrá hoy, en la ciudad suiza y con motivo de la Liga de Diamante, pondrá a prueba, a sus 35 años, su verdadero nivel al rivalizar con la deportista que ha librado vibrantes batallas en los últimos años en procura del reinado mundial de salto triple: la venezolana Yulimar Rojas.
Este sueño se reactiva luego de 23 meses. La última vez que coincideron en un evento fue el 24 de agosto de 2017, durante la final de la Liga de Diamante en Zúrich, en la que casualmente nunguna triunfó. La patriota fue segunda (14.52 metros) y la colombiana, tercera (14.48). Triunfó la kazaja Olga Rypakova (14.55), quien también estará en Lausana.
Lo que llama la atención en el nuevo encuentro entre las suramericanas, es que Rojas, con un salto de 15.06 metros el pasado 20 de junio en el Iberoamericano de atletismo en Huelva, España, logró su mejor marca personal, la cual dejó atrás el más imporante registro de temporada, en poder de Ibargüen, en 14.79 desde Oslo, el 13 de junio.
“Vale la pena pagar un palco para ver de nuevo en competición a Caterine y a Yulimar. Que se reencuentren es bueno para ambas, pues además del resultado, les servirá para replantear detalles para lo que viene, como son Juegos Panamericanos de Lima, Perú, este mes, así como el Mundial de atletismo en Doha, en septiembre”, contó Nasly Perea, entrenadora de la Liga de Atletismo de Antioquia.
Este año, la paisa suma cuatro pruebas, dos en triple y dos en largo; Rojas, cinco, dos también en longitud.
En la prueba de Lausana, que inicia a las 12:00 del día, también se destaca la presencia de triplistas como la ucraniana Olha Saladukha y la griega Paraskeví Papajristou.
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