Nunca, pero jamás, se ha remontado un 4-0 en doble eliminatoria de una competencia europea. Y por lo que se vio ayer, en el juego en el que PSG le propinó un repaso histórico al Barcelona, esta no sería una excepción a esta cifra.
Con un Ángel Di María brillante, que marcó dos goles, un Julian Draxler genial, convirtió otro tanto, y un Édinson Cavani imparable, cerró la victoria, el elenco parisino vivió una noche soñada.
Unai Emery -entrenador de los galos-, que solo le había ganado una vez en 23 juegos al cuadro culé, encontró las fórmulas para contrarrestar los circuitos del Barcelona, sobre todo a Lionel Messi, que tuvo un partido para el olvido.
Un dato curioso es que ayer, 14 de febrero, Di María y Cavani cumplieron 29 y 30 años, respectivamente, y ambos celebraron con gol.
Otro es que el cuadro español no perdía 4-0 por Champions desde abril de 2013, cuando Bayern Múnich lo humilló en Alemania y, luego, lo remató 3-0 en el Camp Nou.
Y para sumar antecedentes, ningún equipo ha remontado en Champions una goleada de esta magnitud.
Al 8 de marzo, en territorio catalán, los barcelonistas llegarán urgidos, sobre todo porque no viven su mejor momento.
Benfica pegó primero
En el otro duelo, disputado en Lisboa, Benfica de Portugal ganó con un tanto de Konstantinos Mitroglou al Borussia Dortmund, cuyo delantero estrella, Pierre Emenick Aubameyang, falló un penal. La vuelta también será el 8 de marzo.