El cantante fue hallado sin vida en su vivienda. La causa de su muerte aún no ha sido confirmada.
El mundo del vallenato está de luto por la muerte de Rafael Blanco, cantante en ascenso dentro del género, quien fue encontrado sin vida el pasado sábado 19 de abril en el interior de su vivienda en Sincelejo, capital del departamento de Sucre.
Blanco tenía una carrera en crecimiento y ya contaba con reconocimiento en la región Caribe, donde compartió escenario con figuras como Rolando Ochoa, Elder Dayán Díaz, Ana del Castillo e Israel Romero.
La noticia fue inicialmente reportada por medios locales y posteriormente confirmada por varios artistas del circuito vallenato que lamentaron su partida a través de mensajes en redes sociales. Entre ellos, Harold Parra y Andrés Ariza Villazón, quienes le dedicaron palabras de afecto: “Hermano querido, descansa en paz”.
Hasta el momento, las autoridades no han entregado información oficial sobre las circunstancias de su muerte, lo que ha generado conmoción e incertidumbre entre seguidores y colegas.
De acuerdo con revista Vea, el hermetismo alrededor del caso ha profundizado el impacto emocional que su fallecimiento deja en la escena musical de Sincelejo y otras ciudades del Caribe colombiano.
Uno de los aspectos que más ha conmovido a sus fanáticos fue su última publicación en Instagram, realizada cuatro días antes de su muerte.
En el post escribió: “Hay que ser bacano. Un abrazo para todos”. Aunque en su momento fue leída como una expresión cotidiana, en retrospectiva muchos seguidores la han interpretado como una despedida anticipada.
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