Los números favorecen ampliamente a Argentina en la Copa América. Los 14 títulos de la Albiceleste por uno de la Roja lo dicen todo.
Además, las cifras positivas son superiores en la selección gaucha, que ha ganado 125 partidos por 67 del rival.
Pero el duelo de hoy, además, tiene un tinte de revancha porque los dirigidos por el Tata Martino perdieron en la edición de 2015 en el cobro desde los 12 pasos, después del 0-0 en los 90 minutos reglamentarios.
En esa ocasión, dos jugadores fueron los más destacados: Eduardo Vargas, el goleador con cuatro tantos que también lo es ahora con seis. Y Lionel Messi, consagrado como el mejor jugador del torneo, como igual se proyecta hoy.
A esta final llegan con sobrados méritos. Argentina ha cabalgado, ganando todos los partidos: de cinco, cuatro fueron por goleada. Chile con un comienzo regular, precisamente cayendo ante los argentinos por 2-1, pero con una gran recuperación que lo llevó a conseguir el marcador más amplio de este torneo, 7-0 a México.
También será el duelo de estrellas, porque si en la Albiceleste suenan Lionel Messi, y Gonzalo Higuaín, en el otro lado están Alexis Sánchez y Arturo Vidal.