Con una reforma sin rumbo claro, el voto contrario de Castellanos a su propia ponencia sorprende. Aquí los detalles.
Durante la discusión sobre el archivo de la reforma tributaria este 3 de diciembre, el senador Jairo Alberto Castellanos votó en contra de la ponencia de archivo que él mismo había firmado el pasado 21 de noviembre, un giro que llevó a cuestionar qué ocurrió entre ambas fechas.
La discusión de la ley de financiamiento avanzó este miércoles en las comisiones económicas del Congreso, que tenían pendiente la definición sobre la ponencia de archivo presentada por diez senadores de la Comisión Tercera. En la Comisión Cuarta de la Cámara, la propuesta fue negada con diez votos por el No y seis por el Sí, mientras que en la Comisión Cuarta del Senado fue aprobada con ocho votos a favor y cuatro en contra.
En la Comisión Tercera del Senado también terminó aprobada, esta vez con once votos por el Sí y tres por el No. Entre esos tres votos negativos estuvo el del senador Jairo Castellanos, presidente de la Comisión Tercera, quien pese a haber suscrito la ponencia de archivo el 21 de noviembre decidió no acompañarla en la votación final.
Su cambio de postura genera sorpresa, pues significa un giro frente a lo que él mismo había respaldado días atrás.
Castellanos no solo firmó la ponencia de archivo, sino que meses antes había expresado públicamente su intención de frenar la reforma tributaria. Cuando fue elegido presidente de la Comisión Tercera del Senado, el 22 de julio de este año, aseguró que el país “no está para otra reforma tributaria” y que desde su comisión le darían “cristiana sepultura” al proyecto. También mencionó que “La realidad social del país no tolera que le sigan metiendo la mano al bolsillo al pueblo”.
El voto negativo de este miércoles contrasta con aquella declaración y con su firma en la ponencia archivadora. Su cambio de posición plantea interrogantes sobre qué ocurrió en el camino y cuál fue la razón de fondo para modificar su postura en una discusión clave para el financiamiento del Gobierno.
Sobre la reforma, hay que mencionar que quedó estancada. Aunque las Comisiones Económicas certificaron quórum y avanzaron en el orden del día, la salida de varios miembros de la Comisión Cuarta de la Cámara rompió el quórum y frenó la votación.
En Senado ya se aprobó el archivo de la ponencia, mientras que en Cámara se negó. El Gobierno defendió el proyecto y ofreció eliminar artículos polémicos, pero el trámite seguirá el 9 de diciembre, sin una decisión definitiva y con señales de que el proyecto podría hundirse.
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