El teflón de Gustavo Petro se rompió en todas las encuestas: va a la baja y contando

En al menos tres mediciones su imagen negativa ya supera la positiva. La mayoría dice que las cosas no van por buen camino. El revolcón ministerial, los “dineros calientes” de su hijo y las reformas le pasan factura.

El tono confrontacional y polémico que encapota cada reforma, anuncio o propuesta de Gustavo Petro le pasó una dura factura y resquebrajó el teflón de popularidad que lo cubrió al inicio de su mandato. Y es que a medida que se van destapando escándalos y controversias que golpean a su Gobierno –que además ponen a tambalear su “reformatón” en el Congreso–, la imagen positiva de Petro cae, inclusive en Bogotá, uno de sus bastiones electorales.

Este jueves se divulgó otro sondeo que ratificó esa tendencia. Según la Encuesta Polimétrica, la favorabilidad del Presidente cayó al 52 %, 10 puntos menos frente noviembre, cuando era del 62 %. Su desfavorabilidad en el mismo periodo se disparó del 31 % al 40 %.

Esta encuesta se hizo entre el 24 de febrero y el 6 de marzo, periodo que coincidió con sendas polémicas y revelaciones que empantanaron la imagen del Mandatario. Por un lado, el 27 de febrero Petro hizo una alocución en la que confirmó un prematuro revolcón ministerial, que implicó la salida de Alejandro Gaviria, un crítico de su reforma a la salud.

Por otro lado, el 2 de marzo pidió a la Fiscalía investigar a su hijo, Nicolás Petro, y a su hermano, Juan Fernando Petro, por posibles sobornos de narcos y a presos, a cambio de incluirlos en la paz total. Horas después se conocieron las explosivas revelaciones de Day Vásquez, exesposa de Nicolás Petro, quien denunció que el hijo del Mandatario recibió “dineros calientes” para la campaña.

La encuesta Invamer Poll de febrero pasado también registró cómo otros escándalos minaron la imagen del Jefe de Estado entre diciembre de 2022 y ese mes. El sondeo, que evidenció que por primera vez la desaprobación de Petro (51 %) era mayor a su aprobación (40 %), se hizo entre el 17 y el 26 de febrero.

Por esos días, Petro no solo fue declarado persona no grata por el Congreso de Perú ante sus intromisiones, sino que venía de protagonizar su “balconazo” (14 de febrero) y se conoció el texto definitivo de su recién radicada reforma a la salud.

Sin embargo, la medición también logró recoger el descontento por otros escándalos previos, entre ellos, la andanada de Petro contra el metro elevado de Bogotá y su idea de modificar el sistema (a principios de febrero); la libertad de Jorge Alfonso López, hijo de la “Gata” y quien fue nombrado gestor de paz; e, inclusive, su fallido cese al fuego bilateral con el ELN (a principio de año), que desató una crisis en la mesa de conversaciones.

Otra encuesta, el Opinómetro de Datexco, evidenció además el impacto de este tipo de controversias en la imagen de Petro en la capital del país, donde históricamente ha sido fuerte en materia electoral. Según el sondeo, en febrero pasado 55 % de los capitalinos desaprobaba su gestión, frente a un 36 % que sí daba su visto bueno a cómo llevaba las riendas del Estado.

El Opinómetro reveló también cómo entre el 1 y el 16 de diciembre la aprobación del Mandatario bajó del 50 % al 43 %. En ese entonces dio rienda suelta a su idea de liberar a integrantes de la Primera Línea procesados por delitos durante las protestas y daba vía libre a que campesinos continuaran con sus cultivos de coca hasta probar que la sustitución era eficaz.

El mismo sondeo registró que –entre el 4 de octubre y el 18 de noviembre– la desaprobación de Petro pasó del 38 % al 40 %. En ese periodo se anunciaba la moción de censura contra la ministra de Minas, Irene Vélez, por las declaraciones que dejaban en vilo los contratos de exploración y explotación petrolera, lo que –de paso– contribuyó a que el dólar alcanzara máximos. Además, se aprobó la reforma tributaria, que no incluyó impuestos clave (como a megapensiones e iglesias).

Este tipo de encuestas contrastan con una medición del Centro Nacional de Consultoría que compartió y pagó –vía Palacio– el propio Petro. A diferencia de los otros sondeos, en este goza de una aprobación del 51,2 % con corte a marzo, frente a una desaprobación del 38,8 %. Sin embargo, hay quienes han puesto en duda su credibilidad, pues se filtró un contrato de esa encuestadora con Presidencia destinado precisamente a medir la percepción y efectividad de la gestión del Gobierno.