Tras casi diez meses de la muerte de Paula Durán, la colombiana de 27 años que falleció en Estados Unidos el pasado 24 de enero, después de haber estado durante más de un mes luchando contra un cáncer, su madre rompe el silencio y decide revelar algunas detalles que acompañaron su vida familiar durante las últimas semanas.
A través de una cuenta de Instagram, con el nombre de Fundación Paula Durán, Gloria Iris Camargo compartió con quienes se conectaron a la transmisión, de qué manera vivió desde la distancia la enfermedad de su hija, ya que solo varias semanas después, y cuando Paula se encontraba en sus últimos días consiguió una visa humanitaria con destino al país norteamericano; y cómo fue su relación con Sergio Vega, el esposo de su hija, durante la última fase de su enfermedad.
Vega, después de que a su esposa la diagnosticaron con cáncer, cuando le encontraron un tumor en el cerebro, fue quien se encargó de hacer público su grave estado de salud y pedir apoyo económico para cubrir parte del tratamiento, y los gastos de sus hijos. Una niña de 9 años, otra de 4 y un bebé recién nacido, quienes también recibían cuidados de una de sus tías. La hermana menor de su madre, Jessica Alejandra Durán.
Camargo aseguró a sus seguidores, que el esposo de su hija empezó a cambiar su comportamiento y la manera como se relacionaba con ella, y su hermana Jessica, en cuanto empezó a recoger dinero. Situación que no comprendió, ya que siempre habían tenido buena relación y al inicio de la enfermedad, él siempre la había tenido al tanto de lo que sucediera con Paula.
“Sergio cambió mucho conmigo. En los EE. UU. fue cruel con nosotros, nunca nos invitó a nada, nunca nos llevó un mercado. Fue muy difícil, cambió muchísimo y yo lo quería mucho. Para mí Sergio era como un hijo más. No le guardo rencor en mi corazón”, señaló la madre de Paula.
También compartió que el objetivo de su hija, al momento de tomar la decisión de irse a Estados Unidos, fue buscar mejores oportunidades para su familia. “Iban con sueños, ilusiones, lejos de personas que quisieran intervenir en su relación, porque si existen personas y mujeres que quieren dañar relaciones (...) Paula soñaba mucho con su hogar y tener otro niño”, señaló.
Su hija se enteró de su enfermedad, mientras esperaba a su tercer hijo. Durante el embarazo empezó a sufrir fuertes migrañas y un reflujo gástrico, que según contó la señora Gloria, no había manera de pararlo; y los médicos se tardaron en identificar qué le estaba provocando todos esos malestares.
Primero le diagnosticaron una anemia y después descubrieron un tumor de cuatro centímetros en su cabeza, el que trataron de extraer, pero semanas después a la cirugía, los síntomas regresaron y le dieron un mes de vida, y fue ahí cuando Sergio empezó a alejarse de ella, y a darle cada vez menos información sobre el estado de su hija.
Al mismo tiempo que este, según cuenta, decide hacer pública la situación de su hija, para de esta forma recibir apoyo, porque ya no podían trabajar y los gastos médicos eran muy altos, aunque tuvieran cobijo del programa Medicar allá en Estados Unidos, no era suficiente.
“Sergio hizo viral esto para que la gente nos ayudara, lo sé, se lo agradezco y lo respeto. En su momento empecé a sentir cosas my extrañas. Sergio dejó de contestar mis llamadas, mis mensajes”, apuntó, y señaló que la relación con él se fue haciendo tan tensa, que empezó a tratar a su otra hija de ladrona, aunque no profundiza en esa situación.
“Sergio trata a Jessica de ladrona, ella no desconfiaba de nadie, amaba a su hermana, a sus sobrinos. Y Sergio se olvidó de todo por estar consiguiendo dinero en las redes sociales”, aseguró la mujer en la red social.
Finalmente, comentó que en el funeral de Paula, Sergio le negó la entrada a la hermana de la joven, lo que para la señora Gloria Iris fue el último detonante, y lo que finalmente le borró la buena imagen que tenía de su yerno.
“Lo único es que mi hija Jessica Alejandra no ve a los niños, Sergio no es tan asequible en esa situación. En el velorio pasaron también cosas. Sergio no autorizó su entrada y esa fue otra de las cosas que a mí me decepcionaron. A Sergio lo quiero, diferente, pero lo quiero y lo respeto. Es el papá de mis nietos”, concluyó Camargo.
