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Patrullera trans destituida gana tutela para reasignación de sexo

  • La reasignación de sexo de Cortés Guarín será una realidad gracias al fallo del Juzgado Administrativo 16 de Bogotá. FOTO FACEBOOK
    La reasignación de sexo de Cortés Guarín será una realidad gracias al fallo del Juzgado Administrativo 16 de Bogotá. FOTO FACEBOOK

El caso de Andrea Cortés Guarín se conoció inicialmente por ser la primera mujer trans integrante la Policía Nacional. Luego por ser destituida por una denuncia de robo en Bogotá. Ahora es noticia de nuevo ya que el Juzgado Administrativo 16 de Bogotá, determinó que recibirá su reasignación de sexo.

La jueza Blanca Liliana Poveda falló a favor de la tutela interpuesta por Cortés en la que reclamaba la protección de sus derechos fundamentales a la salud, vida, identidad sexual y de género.

En el fallo, se ordena al Ministerio de Defensa reunir un grupo multidisciplinario para valorar a Cortés y determinar la viabilidad y acompañamiento en la cirugía de reasignación de sexo. La Policía Nacional tendrá ocho días para consolidar el equipo y aunque es un requisito para realizar la intervención, no será determinante en la decisión médica final.

Cortés Guarín fue destituida e inhabilitada por 11 años para ejercer cargos públicos. La decisión se tomó luego de que el pasado 23 de junio la denunciaran por un presunto robo en una droguería del centro comercial Titán Plaza, en el noroccidente de Bogotá. Las cámaras de seguridad del lugar registraron los hechos y el vídeo de dicha acción circuló por redes sociales junto con la denuncia.

La patrullera tuvo que responder en un juicio disciplinario y la conclusión del juez de la Policía fue que Cortés sí cometió el hurto, de manera que incurrió en una falta “gravísima” a título de dolo “por apropiarse de pertenencia de particular en beneficio propio”.

Andrea Cortés ingresó a la Policía antes de realizar su transición social, lo que significa que aún se identificaba en sus documentos con el nombre y género de nacimiento. Para recibir el respaldo de dicho cambio por parte de la institución, tuvo que interponer, también, una tutela que ganó tras reclamar su derecho al libre desarrollo de la personalidad.

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