Urabá comienza una nueva era. La inauguración de Puerto Antioquia, prevista para este año, marcará un punto de inflexión en la historia del noroccidente antioqueño. Esta terminal marítima, enclavada en Turbo, proyecta a la región como el nuevo eje logístico del país y abrirá las puertas a un desarrollo económico sin precedentes.
Durante décadas, Urabá fue sinónimo de periferia, violencia y olvido estatal. Hoy, en cambio, se consolida como una plataforma estratégica para el comercio internacional.
La combinación de inversión privada, infraestructura portuaria de última generación y una posición geográfica privilegiada han convertido a la región en la nueva joya del Caribe colombiano.
Un dato dimensiona la revolución que traerá Puerto Antioquia: hoy Urabá, con toda su industria bananera, mueve 2 millones de toneladas al año en mercancías; con Puerto Antioquia se van a operar 7 millones, se triplicará.
Por eso se necesitará mano de obra calificada nueva, porque todo ahora está relacionado con el banano y la apertura del puerto permitirá que se transporte carga internacional, contenedores, vehículos, cereales y graneles. Toda esa cadena logística de apoyo a esas empresas se va a instalar en Urabá.
Al cabo de unos años se abrirán agencias de aduana, empresas de transporte terrestre, agencias de cargas, de operaciones logísticas y logística de valor agregado, industrias, hoteles, restaurantes, supermercados y centros comerciales, entre otros. Se calculan 17.000 nuevos empleos formales y cerca de 800 nuevas empresas por el nuevo ecosistema portuario.
EL COLOMBIANO publicará un especial periodístico que recorrerá los hitos de esta transformación. Historias de empresarios, trabajadores, emprendedores, líderes sociales y jóvenes que le apuestan al futuro desde este rincón del país serán el eje de esta publicación que saldrá el 8 de junio.
Se abordarán también el potencial de ser despensa agroindustrial del país, la revolución en infraestructura que permitió ‘pavimentar’ esta nueva era, la oferta de 20 instituciones de educación superior y de salud con la Clínica Panamericana de Comfama, el floreciente sector del turismo con los 290 kilómetros de playas, la riqueza hídrica y natural, sus expresiones culturales, su potencial como meca de medallistas olímpicos, su oferta gastronómica y sus retos en ordenamiento territorial, transporte, servicios públicos y vivienda.