Los delincuentes dejaron sin equipos de cómputo a la Institución Educativa María de los Ángeles Cano, ubicada en el barrio Granizal, nororiente de Medellín, luego de que se metieran abriendo un agujero en la pared.
Ocurrió en las últimas horas, cuando la institución se encontraba sola y haciendo un túnel que da a la sala de informática, se hurtaron los 34 equipos de cómputo que servían a la sala de informática.
Las directivas de la institución educativa pusieron en conocimiento de las autoridades competentes la situación y con las cámaras de seguridad buscan establecer quienes fueron los responsables.
Según el avalúo inicial, los elementos hurtados están valorados en $60 millones. Las indagaciones preliminares darían cuenta de que no ingresaron a otros espacios de la institución educativa, ubicada en la comuna 1 (Popular).
Esta situación no provocó la suspensión de las clases, aunque sí se buscaron alternativas para dictar las clases que requerían estos computadores mientras eran recuperados o reemplazados.