“Eso no es como ir a la tienda y decir deme una tonelada de explosivos”. Con esas palabras se refirió el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, a los cuestionamientos por la falta de fecha para derribar el edificio Continental Towers, prevista para la tercera semana de noviembre, aunque sin un día fijo establecido.
Este proceso será desarrollado por la empresa Atila Implosiones S.A.S, la misma que se encargó de esta labor con el edificio Space en el 2014 o con Bernavento en el 2018.
“En el estudio se identificó que hubo una redistribución de la carga vertical actuante y se aumentaron significativamente las demandas de fuerzas en algunos elementos horizontales y verticales de la estructura. Esto, como consecuencia la remoción de algunos muros de mampostería que hacían parte del sistema de resistencia para cargas verticales y que daban soporte en ciertos sectores de los sistemas de piso y las rampas”, quedó consignado en el informe que se entregó el 7 de octubre.
Por esta razón fueron evacuadas el pasado 12 de septiembre 137 familias del edificio Interclub, vecino a este proyecto enfermo, por el riesgo de colapso de Continental Towers.
El mismo Quintero dejó en vilo que se vaya a hacer la implosión en la semana que él mismo había confirmado a través de sus redes sociales. En una declaración de este viernes, manifestó: “Estamos haciendo todo el esfuerzo para que eso no pase y esperamos la próxima semana informar si pudimos conseguir y cuándo pudimos conseguir los explosivos para saber la fecha exacta de la implosión”.