Una lluvia de ataques ha caído sobre Gilberto Tobón, el profesor universitario que dio el salto a la política gracias a su batallón de seguidores en redes sociales. Hacía apenas unas semanas, el profesor se había enfrascado en una polémica por una declaración sobre los “falsos positivos”. Ahora, la lluvia le ha caído luego de que se reuniera con el expresidente Álvaro Uribe, el líder natural del Centro Democrático y figura de la derecha en el país.
La reunión se hizo pública porque el mismo Uribe publicó un video de poco más de un minuto en el que hace una síntesis del encuentro. El expresidente dice que, pese a las discrepancias, tienen una visión de lo que está pasando en Medellín en el Gobierno de Daniel Quintero. “Hemos hablado sobre la ciudad, sobre su futuro, sobre la necesidad de una administración austera y completamente transparente”, expresó Uribe en el video.
Tobón, a la derecha del expresidente, se mantiene callado. La reunión fue toda una sorpresa para muchos, que de inmediato se fueron lanza en ristre contra el profesor. El mismo Daniel Quintero dijo en su cuenta de Twitter: “Chuscalito acepta a un nuevo miembro”. Se refiere a lo que él ha llamado el pacto de Chuscalito, que en realidad es la oposición. Al alcalde le cayó mal la juntanza de Tobón.
Y es que Tobón se había reconocido como un líder de opinión de izquierda, que en campaña presidencial dijo que Petro era la mejor opción a la presidencia. Incluso, el mismo Tobón apoyó a Quintero en su campaña, cosa de la que luego se arrepintió durante el mandato.
Los aliados de Quintero ya habían atacado a Tobón hace unas semanas, cuando este dijo que Álvaro Uribe no había ordenado los llamados “falsos positivos” durante su gobierno. Quintero y su séquito, que ha soportado su visión política en el antiuribismo, lo tachó de uribista, voltiarepas y demás.
El video sobre la reunión lo terminó Uribe con jocosidad, diciendo que a Tobón lo conocía desde la universidad y que estaba “enterito”, contrario a él, que está “gastado”.
Ahora bien, queda claro que Tobón está pensando seriamente en lanzarse a la Alcaldía de Medellín en 2023, una contienda que pinta desde ya muy compleja, con candidatos en los extremos y en la que seguro no faltarán las polémicas.