Así como sobre las mesas se veían inofensivas pistolas, ametralladoras y escopetas de plástico de todos los colores, también se observaban amenazantes cuchillos, puñales y navajas, armas cortopunzantes todas de color metal, que cargaban niños y adolescentes de la comuna 8.
Lo bueno fue que unas y otras las entregaron sus dueños y a cambio se les obsequiaron paquetes con material escolar, que les servirán para reforzar su proceso educativo y como incentivo para entender que en la vida el mejor camino es el estudio.
El intercambio fue el acto central de la campaña “Se vale soñar, educación, prevención y desarme”, que adelanta la Fundación Los del Camino en varias ciudades del país, en asocio con la Policía y Bancoomeva, y que el sábado tuvo como epicentro Medellín.
José Arizabaleta, director de Los del Camino, recordó que es la segunda vez que la campaña se realiza en la capital antioqueña. La primera fue en 2016 en el sector Villa Santa Fe, comuna 7, Robledo, donde participaron 1.120 niños y jóvenes que entregaron juguetes y armas voluntariamente.
“El objetivo es educar para prevenir el delito, para la paz y para desarrollar procesos de convivencia en espacios de alto riesgo social”, señaló.
Este año, se eligió Villatina porque, históricamente, ha sido un barrio muy azotado por el conflicto urbano.
Lo reconoce Lizeth Giraldo, una madre habitante del sector, para quien lo positivo de la jornada es que “los niños, tienen la oportunidad de cambiar las armas por kits que les ayudan para la educación, y a la vez les motiva la reflexión en una situación de violencia como la que se está viviendo acá en el barrio”.