Empresas Varias de Medellín anunció la entrada en funcionamiento del Vaso La Piñuela, cuya área comprende 5.431.460 metros cúbicos y tendrá una capacidad para recibir 8 millones de toneladas en residuos, de manera que ayudará a extender la vida útil del relleno sanitario La Pradera hasta 2030.
Según Alejandro Gallego, gerente de la compañía operadora, ya fue radicado ante Corantioquia el documento para la modificación de la licencia ambiental y se espera que el alivio generado por el nuevo Vaso, con una inversión de 400.000 millones de pesos, beneficie a toda el Área Metropolitana y a 45 municipios adicionales de Antioquia.
“La entrada en funcionamiento del nuevo Vaso La Piñuela, al igual que la participación activa en proyectos como la generación de energía a través de residuos sólidos, la segunda fase de la Planta de Tratamiento de Lixiviados y la futura Estación de Transferencias, posicionan a Emvarias a nivel nacional como referente en el manejo integral de residuos sólidos en procura de la sostenibilidad ambiental”, subrayó Gallego.
En línea con este logro, el jefe de Disposición Final de Emvarias, Santiago González comentó que “en Colombia la situación es cada vez más complicada debido a la corta vida que tienen los rellenos sanitarios, sumado a la dificultad para operar los mismos”,
La solicitud para la licencia ambiental contempló encuestas a 3.074 unidades sociales, monitoreo y estudios sobre calidad del agua, mitigación de olores, calidad del aire, actualización del Plan de Manejo Ambiental y la socialización del proyecto con la comunidad y administraciones municipales de Donmatías, Santo Domingo y Barbosa que hacen parte del área de influencia del Relleno Sanitario La Pradera.
El Vaso La Piñuela era necesario puesto que ya se aproximaba al clausura del Vaso Altaír, uno de los tres ubicados en La Pradera y operante desde el 2013. Según los datos recientes, a este relleno sanitario llegan más de 3.000 toneladas de basura cada día, por lo que varios expertos han hecho hincapié en la necesidad de aumentar los índices de aprovechamiento para reducir la carga en los lugares de disposición final.
