En la etapa final del juicio que se sigue contra el ganadero Santiago Uribe Vélez por los delitos de concierto para delinquir y homicidio, el turno ante el estrado, este martes, fue para la defensa del acusado que lidera el penalista Jaime Granados.
La audiencia se celebró de manera virtual y fue presidida por el juez primero penal del circuito especializado de Antioquia.
Ante el despacho, Granados recalcó que “este caso se trata de una verdadera colección de abusos raseros de la miseria humana que se encuentra plagado de falsos testigos, testigos secretos, espurios señalamientos, chismes presentados como pruebas, funcionarios que han deshonrado su investidura, de complots con fines de desprestigio político e incluso de manipulación mediática”.
Dentro de este expediente se investiga la muerte del campesino Camilo Barrientos, ocurrido en Yarumal, el 25 de febrero de 1994.