El corregimiento enfrenta un problema urbanístico por la construcción irregular y mientras la Alcaldía intenta resolver la situación demoliendo propiedades, habitantes piden diálogo.
A pesar de las protestas y plantones que han realizado los ciudadanos en contra del desalojo y demolición de más de 500 inmuebles en Santa Elena, este lunes 29 de mayo en horas de la mañana continuarán las demoliciones.
De acuerdo con información de la Secretaría de Seguridad, tal como se fijó el aviso de demolición el pasado 17 de abril de 2023, se tiene previsto que la demolición inicie en horas de la mañana. Además, se instalará un puesto de mando unificado en el que habrá presencia de la Personería, Policía, Defensoría del Pueblo y las secretarías de Inclusión y Seguridad.
Según ha documentado EL COLOMBIANO, 530 construcciones han visto frenadas sus operaciones y 476 más están en la mira por supuestas anomalías en sus licencias. La cuestión es que los moradores reconocen que parte del corregimiento se ha construido sin licencias, de forma irregular.
Algunas propiedades, confirman en la zona, afectan puntos de retiro de quebradas, lotes de reserva y predios con fauna y flora relevantes. Proyectos de hostales y glampings se abren paso sin freno alguno. Pero también muchas viviendas son familiares, alegan los vecinos, y eso debería llevar a una actualización de los usos del suelo en el POT de 2014.
De acuerdo con la información que previamente publicó EL COLOMBIANO, el municipio se volvió un atractivo turístico y comercial que alteró el paisaje para construir glampings y ecohostales. El crecimiento desmesurado de inmuebles para hotelería tiene afectados los suelos y fuentes de agua. Zonas boscosas y protegidas son ofrecidas en Instagram y Facebook para la venta.
Un problema mayor son los glamping que se construyen sin las normativas técnicas, lo que no solo se convierte en un problema urbanístico, sino de seguridad para quienes van a ellos.
