Un grave hecho ambiental se dio contra un importante número de abejas en el municipio de Alejandría, en el oriente del departamento.
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Según detalló, la mortandad de los insectos se habría dado por un envenenamiento con una sustancia química.
Un grave hecho ambiental se dio contra un importante número de abejas en el municipio de Alejandría, en el oriente del departamento.
Según denunció en redes sociales el señor James Mira, propietario de la empresa Néctares y Mieles del Bosque, su apiario en la vereda San Pedro sufrió graves daños luego de lo que él calificó como “manos criminales” acabara con cerca de nueve colmenas que alojaban a cerca de 200.000 de estos insectos de los que deriva su sustento.
En diálogo con EL COLOMBIANO, Mira detalló que el pasado domingo de 7 de julio, tras una jornada de ventas en Guatapé y en Medellín retornó al apiario de su propiedad y encontró el desolador panorama.
“Encontré que nueve de las 11 colmenas que tenía allí estaban destruidas por manos criminales. Y digo esto con base en el desorden que dejaron los victimarios y en el veneno usado contra las abejas. Insisto en que esto no fue un acto fortuito o espontáneo, sino que fue premeditado”, señaló.
Mira comentó que, aunque las autoridades de la Inspección de Policía tomaron muestras del veneno usado, él sospecha que se habría usado un plaguicida o un pesticida para haber causado tan grave mortandad de abejas y larvas de la especie Apis mellifera.
Más allá de los daños económicos a las colmenas, que pueden rondar los $5 millones, Mira hizo hincapié en el daño ecológico que representa que ya no estén por la zona de reserva los cientos de miles de insectos polinizadores.
“Esto es más que un atentado a una familia campesina, porque esto no solo afecta mi unidad productiva, sino también el entorno y el ecosistema. El daño puede ser de más de 200.000 abejas, porque realmente pueden ser casi 400.000”, añadió.
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Frente a quien estaría detrás del ecocidio, Mira señaló que él no tiene enemigos y que descarta que el hecho haya sido un accidente de algún cultivo vecino, pues aunque admite que sí se han dado muertes incidentales, estas a lo mucho solo llegan a afectar una o dos colmenas.
“Pero ante la mortandad y los daños, es evidente que hubo una intención de envenenar a las abejas. Esto yo lo atribuyo yo a tal vez una venganza de alguien a quien una vez denuncié en el pasado”, explicó sin dar más detalles para no entorpecer las investigaciones.
Finalmente, Mira lamentó que hasta ahora nadie de la Alcaldía, ni la Gobernación de Antioquia, ni la autoridad ambiental Cornare le hayan contactado para apersonarse del caso e investigar la mortandad de abejas.
“Salvo el apoyo de algunos miembros de la comunidad de Alejandría yo más bien me he sentido solo, teniendo en cuenta que el apiario se levantó con recursos económicos y apoyo técnico del municipio y de Cornare. O sea, para mí este daño también se lo hicieron a estas entidades, pero acá no ha venido nadie”, apuntó.
Este diario consultó a la Alcaldía de Alejandría para conocer avances de la investigación, pero al momento de la publicación no se había emitido respuesta. Igualmente, se hizo con Cornare, pero desde esta entidad indicaron que por ahora no se pronunciarán sobre este caso.