Un derrumbe en Itagüí dejó al descubierto vestigios de material explosivo

El material recuperado por la Policía es una evidencia de la intensa actividad industrial extractiva que proliferó en Itagüí durante décadas.

La emergencia fue atendida por personal antiexplosivos de la Policía. No fue necesario evacuar a la población. FOTO cortesía policía nacional

De todo se imaginó Martha Lozano menos que a pocos metros de su casa, donde vive hace más de 20 años, encontraran enterradas canecas con material explosivo. Ayer, más con curiosidad que susto, presenció cómo la Policía, en un procedimiento rápido, se llevó las dos enormes canecas, rezagos de la vieja actividad industrial en Itagüí.

El hecho ocurrió en la vereda Olivares. Antes del mediodía las autoridades llegaron al lugar y acordonaron el ingreso a un parqueadero. Llegaron hasta un morro y allí encontraron medio enterrado el material explosivo, que un pequeño derrumbe dejó al descubierto, lo que alertó a los vecinos que inmediatamente llamaron a la Policía.

Antes de que corriera el rumor de que se trataba de algún plan criminal descubierto a tiempo, el secretario de Seguridad, Rafael Otálvaro, aseguró que el material explosivo fue abandonado por las industrias que antes operaban en ese predio y recordó que allí funcionó una cantera, en cuya actividad posiblemente se iba a utilizar este material, y también hubo ladrilleras.

El material había acumulado años, agua y tierra y no había ningún riesgo de que pudiera explotar, según precisó Otálvaro.

Ramiro Atehortúa, otro vecino del sector, aseguró recordar patentico la época en la que operaban cantera y ladrilleras, incluso cuenta que en alguna época cargó ladrillos y material, un ‘camello” que, dice, le quitó hambres a más de una familia en el municipio. Sin embargo, reprocha la “irresponsabilidad” de quienes no tomaron las medidas de seguridad necesarias una vez cerraron sus negocios.

“Imagínese que ese material no se hubiera podrido, el daño tan horrible que hubiera causado. Y este municipio que tuvo un reguero de canteras, ¿habrá más caletas así?”, cuestiona.

Efectivamente, en las últimas dos décadas el ordenamiento territorial en Itagüí les quitó margen de maniobra a las canteras y ladrilleras que proliferaron durante gran parte del siglo 20. En Olivares, por ejemplo, la extracción de material fue tan intensiva durante décadas que la zona presenta una alta erosión, sumado a riesgos por diversas fallas geológicas