Las fuertes lluvias de este año han terminado con un dictamen crítico para cientos de familias en la ciudad: la evacuación, definitiva o temporal, de sus viviendas. Según el Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres (Dagrd), son 1.089 los hogares que han recibido esa recomendación.
Entre estos, la evacuación definitiva, debido al riesgo, ha sido la realidad de 530 viviendas; las 559 restantes recibieron una recomendación temporal, pues, aunque el riesgo no es inminente en estos casos, las probabilidades de desastres por la frecuencia de lluvias son altas, según la entidad.
Pero las lluvias no son, en sí, la causa completa de los desastres. Entre las emergencias que han sacado a los medellinenses de sus hogares se cuentan deslizamientos, crecientes súbitas e inundaciones. A estas se suman otras situaciones que disparan los riesgos, como la saturación de los terrenos, las pendientes de las laderas y las construcciones irregulares —en zonas de retiro de quebradas, por ejemplo—.