150 conductores de Transportes Medellín Castilla S.A., que cubren las rutas 402, 282, 254, 289, 288, salieron a paro ayer, luego de que uno de sus compañeros fue agredido físicamente por tres jóvenes, porque se negó a llevarlos por $2.000, cuando cada pasaje cuesta $1.900.
El hecho ocurrió a las 5:00 a.m. de ayer jueves. El conductor no presentó heridas graves y fue atendido en la Unidad Intermedia de Castilla, donde le dieron de alta, en la tarde.
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“Yo les dije no los puedo llevar, entonces se enojaron, me tiraron la plata en la cara, me golpearon y me reventaron los dientes; uno de ellos sacó una puñaleta, yo me bajé del carro y salí corriendo”, dijo el afectado.
Compañeros del agredido explicaron que la empresa “se volvió una dictadura”, porque les está cobrando $30.000 por cada pasajero que se suba por la puerta de atrás o que se salte la registradora; por eso enviaron una carta al Ministerio de Trabajo.
Los conductores realizaron un plantón para manifestar su inconformismo, pero al no recibir respuesta de la empresa se movilizaron hasta las oficinas, donde realizaron una reunión y acordaron levantar el paro.
Juan Fernando Giraldo, conductor, aclaró que en el encuentro acordaron dejar la sanción, porque se comprometieron a no llevar pasajeros por una suma inferior a la tarifa.
“El patrón nos va a dar un incentivo aumentando el porcentaje que venimos ganando, eso lo vamos a fijar la semana que viene. Cada ruta va a tener una reunión y ahí se va a establecer cuánto nos van a subir”, señaló.
Además se van a revisar los turnos de trabajo, porque son muy extensos.
