El amasijo colombiano, que en años anteriores había encabezado el listado global de panes, descendió al segundo lugar.
El pandebono volvió a ser tendencia mundial esta semana, pero esta vez desde un lugar distinto al habitual. No como el mejor pan del mundo sino perdiendo el lugar que ha ocupado durante años, pues la nueva clasificación de panes de TasteAtlas, una de las guías gastronómicas más consultadas del mundo, ubicó al amasijo colombiano en el segundo puesto entre 535 preparaciones evaluadas.
Con una calificación de 4.51 basada en 19.855 votos, tras filtros que, según la plataforma, eliminan bots y votaciones nacionalistas, el panecillo del Valle del Cauca perdió la corona que ostentó en ediciones anteriores. Su lugar lo ocupó el naan indio, una preparación clásica de la cocina del sur de Asia que obtuvo 4.53 puntos.
La diferencia entre ambos es mínima, pero suficiente para confirmar un giro en las preferencias globales. TasteAtlas explicó que su sistema busca privilegiar votaciones “democráticas”, pues no hay jurados ni paneles, solo miles de usuarios calificando lo que comen.
En esa lógica, el naan logró imponerse gracias a su presencia extendida en restaurantes de todo el mundo y a la versatilidad que lo ha convertido en acompañamiento para curris, guisos y recetas tradicionales de la India. Su versión más conocida combina harina, yogur y sal, horneada en un tandoor y terminada con mantequilla y ajo, aunque existen variantes rellenas con paneer, especias masala o cilantro fresco.
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En años recientes, TasteAtlas ha destacado al pandebono como uno de los panes con mayor identidad en América Latina y su presencia en listas especializadas ha despertado la curiosidad de viajeros, cocineros y amantes de la panadería artesanal.
En su reseña histórica, el sitio web recuerda que el pandebono comparte parentesco con otros panes de queso suramericanos, pero mantiene particularidades que lo diferencian, como el uso de harina o fécula de maíz, el toque dulce y la elasticidad que conserva su miga caliente.
Siempre que surgen actualizaciones de este ranking, la conversación en redes sociales gira en torno a otros amasijos colombianos, como el pandequeso, pandeyuca y almojábana, que forman una misma tradición pero con diferencias marcadas por el tipo de queso, la técnica y el territorio que les dio origen.
El pandebono, asociado al Valle del Cauca, destaca por su elasticidad; el pandequeso tiene una miga más harinosa; el pandeyuca es notablemente crocante, y la almojábana, típica de la región cundiboyacense, ofrece una suavidad particular gracias a su mezcla de maíz y queso.
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