A partir de una clase de sociología y de anuncios que veía en el metro de Nueva York con imágenes de “mujeres sin cabeza”, la feminista y comediante Marcia Belsky inició una campaña que muestra otra forma de cómo la industria del cine reproduce patrones machistas.
Hollywood en los últimos años ha recibido todo tipo de denuncias que exigen igualdad de género. Las quejas no se ciñen a casos de acoso sexual o de inequidad salarial, sino a múltiples prácticas culturales.
“Esta industria aún retrata a las mujeres como felices de estar en el fondo y disponibles sexualmente”, comentó Belsky al portal Usa Today.
Desde abril pasado, en su blog The Headless Women, la activista comenzó a denunciar la deshumanización de las mujeres y la fragmentación en partes sexuales para el consumo masculino.
“No lo vemos para nada. Está completamente aceptado que los cuerpos femeninos sexualizados sean paisajes para la acción masculina en la cultura pop y los medios”, dijo.
Aunque su investigación se centró en filmes de los últimos años, encontró patrones que se remontan a clásicos como El graduado o las primeras cintas de James Bond.
