Estuvimos listos a dar vía por la autopista Medellín-Bogotá el lunes a primera hora. Se removió la tierra que nos habíamos propuesto mover e intempestivamente se aflojó otro pedazo de tierra y tuvimos que parar. La última información es que es posible que hoy pueda empezarse a dar una vía bajando si no ocurren más problemas. Mañana (hoy), de pronto en la noche tengamos los dos carriles.
El domingo estuvimos contando 140 volquetas, 14 excavadoras, máquinas de martillo. Esa maquinaria cuesta, por día, 300 millones de pesos; más 300 millones en peajes, son 600 millones. Este problema, que lleva 10 o 15 días, nos puede llegar a costar 10.000, 15.000 o 20.000 millones de pesos. Un pequeño derrumbe, simplemente hecho por el agua.
Un problema que a veces los ciudadanos no entienden, a uno le da pena no resolver el problema de inmediato, pero no solamente está la naturaleza de por medio sino que los costos son bastante altos. ¿Quién iba a pensar que un derrumbe, que nadie había soñado con él, podía costar 15 o 20 mil millones de pesos? Sería interesante que pudiéramos tener hoy el camino para comodidad de la gente y superar los problemas que hemos tenido para el transporte de carga.