A tan solo ocho días de que termine la Oferta Pública de Adquisición (OPA) que lanzó el jeque árabe Tahnoun bin Zayed por Nutresa, se están dando movimientos al interior de la junta de Sura que no parecen de empresarios sino de ajedrecistas.
En la tarde de ayer renunciaron a la junta del Grupo Sura cuatro miembros que no están alineados con el banquero Jaime Gilinski. Esta fue una respuesta a los movimientos del magnate caleño que desde hace un año está detrás del negocio de galletas del GEA y muchos más.
La historia es así: en la mañana de ayer, JGDB Holdings y Nugil, empresas con las que Gilinski ha lanzado sus ofertas por las compañías paisas, solicitaron convocar una asamblea extraordinaria de accionistas de Sura para el próximo viernes, día en que terminará la OPA por hasta el 31,25% de Nutresa.
El objetivo de Gilinski es darle un espaldarazo a su socio árabe desde adentro de Sura. Al parecer quería modificar los estatutos de la empresa para que la asamblea de accionistas decidiera vender las acciones y no la junta.
A todas luces, se trata de una movida interesante, máxime cuando la junta de Sura estaba maniatada para decidir. Y es que dos miembros fueron inhabilitados por la Supersociedades; así las cosas, Gilinski quedó con tres miembros apoyándolo y dos en contra.
Como se necesitan mínimo cuatro votos favorables de la junta de Sura para aprobar decisiones, a Gilinski no le daban las cuentas. Entonces el as bajo la manga fue apelar a que la asamblea tomara la decisión porque ahí tendría mayorías, entendiendo que Nutresa no podría votar por ser la sociedad sujeta de la OPA. Así, el camino le quedaría allanado para que se aprobara la venta del 35,23% que Sura posee en Nutresa, al árabe.
GEA a la acción
Pero si la jugada de los Gilinski para dejar encaminada la OPA es astuta, más sagaz fue el movimiento con el que respondieron los cuatro miembros de junta que no le copian.
En la tarde de ayer estos cuatro miembros presentaron su renuncia a la junta de Grupo Sura con carácter inmediato. Salieron Santiago Cuartas Tamayo, Pablo Londoño Mejía, Luis Javier Zuluaga Palacio y Sebastián Orejuela; y momentáneamente solo quedaron en ella las fichas de Gilinski: Andrés Bernal, Ángela Tafur y María Ximena Lombana.
¿Por qué es una movida estratégica? La salida de estas cuatro personas impedirá a los Gilinski tener el quórum suficiente para adelantar la asamblea solicitada para el otro viernes, pues solo habrá 3 miembros de una junta de 7.
Hecha esta jugada, Sura irá directo con el segundo “embate”. La compañía convocó a asamblea extraordinaria de accionistas para el próximo martes 22 de noviembre, y ahí se escogerán los nuevos miembros de la junta directiva.
De manera que volverán a tener en esas cuatro sillas a personas independientes del banquero y alineadas con el GEA, con el agregado de que estos nuevos integrantes llegarán sin impedimentos para las decisiones clave en torno a la OPA (ver “Antecedentes”).
Así, las empresas paisas estarían en capacidad de aguarle la fiesta a Gilinski, porque el pulso volvería a estar 4 a 3 en favor del GEA y ahora sí habría quórum para que sea la junta la que decida en la OPA por Nutresa, y no la asamblea.
Llama la atención que ayer Nutresa también convocó a asamblea. Será el 21 de noviembre, un día antes de la de Sura, y busca algo muy específico: poner a consideración la reforma al numeral 6 del artículo 78 de sus estatutos, que establece como una de la atribuciones del presidente de la empresa la asistencia a reuniones de asambleas o juntas de asociados de las compañías, para dar su voto en ellas de acuerdo con las instrucciones que reciba de la junta.
Es decir, con el ajuste, el presidente podría votar sin atender las directrices de la junta; esto, luego de que Gilinski expresara sus reparos respecto a que el representante de Nutresa no había pedido permiso para poder votar y estar presente en una pasada asamblea de Sura.
Así, el camino estaría despejado para que al llegar a la asamblea del 22 de noviembre convocada por Sura no haya enredos para votar a los cuatro nuevos miembros del GEA en la junta de Sura.
¿El jeque extenderá la OPA?
Un detalle que no se puede escapar en las ya casi que rutinarias convocatorias a asambleas, es que Gilinski haya programado la suya para la tarde del mismo día en que se acaba la OPA del jeque árabe.
Lo que se acostumbra es que ante este tipo de ofertas los agentes del mercado tomen su decisión –de vender– al menos con dos días de anticipación, a sabiendas de que puede haber problemas técnicos o errores de sistema que hagan que su aceptación a ceder las acciones se queden en el limbo.
Entonces, ¿es esta una señal de que el jeque árabe quiere alagar su OPA para que Sura vote sí o sí si vende su participación? La pregunta queda en el aire, pero cabe destacar que en su solicitud para convocar a asamblea, Gilinski deja claro que en el caso de que no haya quórum suficiente el próximo viernes, 18 de noviembre, habrá una segunda convocatoria para adelantarla el próximo 6 de diciembre.
En este punto vale referenciar que en el cuadernillo en el cual el jeque emiratí revela sus intenciones en Nutresa se aclara que aunque originalmente la oferta va hasta el 18 de noviembre, podría extenderse hasta el próximo 19 de diciembre.
La propuesta sobre la mesa es de 15 dólares por cada acción de Nutresa, que con la Tasa Representativa del Mercado vigente ($4.806,07) asciende a $72.091,05. Para muchos es una cifra más que interesante, mientras otros plantean que no responde al valor real de Nutresa y sus distintos negocios.
En el panorama está otra asamblea extraordinaria convocada por el Grupo Argos, que este 16 de noviembre deliberará los posibles conflictos de interés de miembros de su órgano directivo de cara al análisis de la oferta por Nutresa.
También se divisan nuevas medidas legales en el proceso, pues Sura dijo anoche que los representantes de Gilinski en su junta sostuvieron una reunión ayer, para la que no tenían facultades legales, manifestando su intención de aceptar la OPA por Nutresa.
22
de noviembre es la fecha en la que la asamblea de Grupo Sura elegirá su junta directiva.