La historia de Elliott Hill es una de las más inspiradoras para quienes inician su carrera profesional. “Comencé en Nike como pasante en 1988, ocupando 19 roles distintos antes de retirarme en 2020 como Presidente de Consumidor y Mercado. En octubre de 2024 regresaré como presidente y CEO”, resume Hill en su perfil de LinkedIn.
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El anuncio de su regreso coincidió con la jubilación de John Donahoe, quien lideró la compañía sin obtener los resultados esperados.
El delicado momento de Nike
El presidente ejecutivo, Mark Parker, explicó la decisión del consejo: “Dado el desempeño reciente y nuestras necesidades futuras, quedó claro que la experiencia de Elliott, su estilo de liderazgo y su profundo conocimiento de la industria y nuestros socios lo convierten en la persona ideal para liderar la próxima etapa de crecimiento de Nike”.
Por su parte, Donahoe comentó: “Ahora era el momento adecuado para un cambio de liderazgo, y Elliott es la persona indicada. Estoy entusiasmado por los futuros éxitos de Nike bajo su dirección”.
Este cambio ocurre en un contexto desafiante para Nike, cuyo valor bursátil ha caído aproximadamente un 25% este año y más del 21% desde que Donahoe asumió el cargo en 2020, según datos de Investing. En contraste, sus rivales como Adidas, Deckers (propietaria de Hoka), y On Holding han visto aumentos de 23,3%, 36,5% y 84,4%, respectivamente, en el mismo período.
Los analistas señalan que Nike ha perdido terreno en la innovación y atractivo para el consumidor, proyectando una caída en ventas para el año fiscal 2025 tras cuatro trimestres consecutivos de resultados decepcionantes. En respuesta, Donahoe implementó un plan de austeridad que incluye recortes por 2.000 millones de dólares y la reducción del 2% de la plantilla.
Cuando se dio el anuncio, la acción de Nike en la Bolsa de Valores de Nueva York pasó de 80 dólares a 87,39 dólares en cuestión de minutos. Lo que muestra la buena reacción del mercado al anuncio. Al cierre de este viernes la acción se valorizó 6,84%.
Las lecciones del retorno de Hill
El regreso de Hill a Nike envía un mensaje claro sobre la importancia de la experiencia frente a la juventud y pone en evidencia la necesidad de fortalecer las políticas de retención de talento. Empresas de diversas industrias, como G&L Group, han comenzado a contratar personas mayores de 50 años y reincorporar jubilados, reconociendo el valor de su experiencia, madurez y estabilidad laboral.
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El retorno de Hill también refuerza la idea de que un líder con profundo conocimiento de los valores y cultura de la empresa puede ser crucial para su éxito. Scott R., ex historiador corporativo de Nike, expresó en LinkedIn: “Hay un sentimiento palpable de optimismo, esperanza y alegría, tres cosas que han faltado en los últimos tiempos. Si alguien puede reunir a la plantilla existente y persuadir a antiguos colaboradores para que regresen, es Elliott”.
Los retos de Hill en Nike
Hill asume el liderazgo en un momento crítico para la compañía. “Nike siempre ha sido una parte fundamental de quien soy, y estoy listo para llevar a la empresa hacia un futuro aún más brillante. Durante 32 años he trabajado con los mejores, ayudando a llevar a la compañía a donde está hoy”, declaró Hill.
Añadió que espera reconectar con los empleados y socios, y crear nuevas alianzas para lanzar productos innovadores que mantengan a Nike como líder en el mercado. Su misión no será fácil, pero su remuneración refleja la magnitud del desafío: según un comunicado de Nike a la SEC, Hill recibirá un salario base de 1,5 millones de dólares, un bono equivalente al 200% de ese salario y un incentivo anual de 15,5 millones de dólares.
