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Carta de navegación de Duque, con un panorama sombrío
El Plan Nacional de Desarrollo logró que se aprobaran 301 de los 311 artículos que lo componen.
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El ‘Pacto por Colombia, pacto por la equidad’ logró luz verde en el Congreso el viernes. Aún falta un segundo debate. FOTO Colprensa
26 de marzo de 2019
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El Plan de Desarrollo que estuvo a punto de ser expedido por decreto a falta de los votos suficientes para su aprobación, finalmente logró pasar la primera prueba en el Congreso durante la sesión de las Comisiones económicas conjuntas del Senado y la Cámara, encargadas de dar el primer aval.
Ahora, tras sufrir un primer acalorado debate, el presidente Iván Duque pareciera no tener un panorama claro de cara a la segunda discusión, que deberá sortearse durante 40 días y aprobarse como máximo el 7 de mayo.
Esta semana fue definitiva para este trámite porque se cumplían los 45 días que la Ley Quinta dicta para que se discuta sobre el Plan de Desarrollo, presentado por el presidente, ante el Congreso, el 6 de febrero.
En este tiempo, los ponentes del PND se encargaron de analizar el documento, reunieron y estudiaron alrededor de 2.698 propuestas de modificaciones y nuevos artículos. Incluso, para este fin, se realizaron foros regionales para escuchar las propuestas que cada departamento quería aportar al ‘Pacto por Colombia, pacto por la equidad’, como se le denomina a la hoja de ruta de Iván Duque.
Qué tiene el Plan Duque
La apuesta del Gobierno cuenta con un Plan Plurianual de Inversiones (PPI) por 1.096 billones de pesos que se destinarán a 16 pilares estratégicos en los diferentes departamentos. A Antioquia le corresponden 96 billones.
Esta iniciativa es la apuesta más importante de cara a estos cuatro años, y con la que el gobierno Duque espera apalancar un crecimiento económico anual cercano al 4 %.
De ahí que entre las metas más importantes se cuente el hecho de que sectores como la economía naranja sean vitales para el plan. La proyección es que las actividades asociadas a la industria creativa logren una tasa de valor agregado en 5,1 % en promedio, y que se alcancen ventas externas por mil millones de dólares.
Otro de los puntos estará en cuál será el papel que juegue el uso del fracking, esto por la necesidad, como se plantea en el proyecto, de contar con el crudo para abastecer la demanda local y seguir siendo competitivos en el mercado externo de petróleo.
De otro lado el café, que vive tiempos de crisis por la caída en el precio, también espera el apoyo con la creación de un nuevo fondo de estabilización de precios, petición que en más de una ocasión se ha propuesto desde los productores.
La idea es que este plan de Duque logre ver la luz, pues el presupuesto de política económica, plasmada en esta hoja de ruta, será esencial para que el país pueda llegar a aumentar índices de productividad, pasar del 0,65 % al 1,1 %; y que la inversión extranjera se incremente un 25,7 %.
La controversia
Desde que se radicó el proyecto, distintos sectores discutieron sobre los artículos que llamaban la atención, los cuales -denunciaron- irían en contra de la equidad de la que se jacta el Plan.
Uno de ellos fue el ‘mico pensional’ que denunció la senadora de Alianza Verde, Angélica Lozano, contemplado en el artículo 117, el cual fija un plazo de 10 días para solicitar devolución del saldo ahorrado, en caso de no contar con las semanas suficientes para la pensión. De no responder en dicho plazo, el dinero se trasladará a un fondo de Beneficios Económicos Periódicos (Beps). El artículo no fue eliminado, se modificó, pues el plazo que otorga ahora es de cuatro meses (ver módulo 1).
El asunto no fue fácil, la ponencia llegó tarde, el Gobierno pretendía que más de 100 temas que no habían sido discutidos fueran incluidos; Cambio Radical se declaró en rebeldía; no había los votos suficientes pues el quórum era exiguo, los micos seguían (y siguen) rondando el articulado, y la aprobación fue accidentada.
Pero el milagro de la aprobación llegó. Durante el debate la bancada de Cambio Radical anunció su retiro porque “es irresponsable con el país votar proposiciones que no han sido estudiadas”. Por esta razón, el quórum ese día no fue suficiente. Al siguiente día, paradójicamente, gracias a que el senador Arturo Char y el representante Luis Eduardo Díaz, ambos de Cambio Radical, llegaron justo al llamado a lista, completaron el quórum.
Lo que viene
El plan deberá enfrentarse a temas sensibles como la viabilidad o no de destinar recursos públicos para sanear la situación financiera y operativa de Electricaribe, además de qué tantas facultades de más se le debería dar a la Superintendencia de Salud, aspectos que para el senador liberal Mario Castaño son sensibles.
A esos vientos cruzados se suma el hecho de que aquellos congresistas de la bancada de Cambio Radical que ayudaron a rescatar el plan podrían enfrentarse a sanciones de su partido, cuya cabeza, el exvicepresidente de la República, Germán Vargas Lleras, había pedido no apoyar.
Para José Roberto Acosta, miembro de la Red por la Justicia Tributaria, el segundo debate del plan económico de Duque “tendrá trabas muy fuertes en plenaria. Se podría caer. La salida entonces sería firmarlo por decreto y allí también hay una posibilidad muy grande de que para la Corte Constitucional no sea viable. El panorama parece no ser el mejor”.
Aún así hay voces que contradicen que el futuro de este Plan Nacional de Desarrollo esté en entredicho. Una de ellas ha sido la del exministro de Minas, Amylkar Acosta, quien ha dicho que “es buen síntoma que el proyecto haya sido aprobado por las Comisiones económicas, solventando el riesgo de tener que ser aprobado por decreto”.
Además, aseguró que el buen panorama está en que aquellos artículos polémicos que fueron altamente criticados por sectores políticos y la opinión pública “fueron retirados y ni siquiera contemplados desde el Gobierno”
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billones es el presupuesto que contempla el Plan Plurianual de Inversiones.
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