Desde las 4:00 de la mañana, el jueves 30 de mayo, hubo adultos mayores esperado ingresar al Jardín Botánico de Medellín, donde el presidente Gustavo Petro encabezó la entrega de subsidios del programa Colombia Mayor, que ya existían desde hace muchos años, pero al cual se le hizo un aumento de $80.000 a $225.000.
Al evento, en el Orquideorama, dirigido a personas mayores de 80 años, ingresaron ancianos en silla de ruedas y algunos con acompañantes insatisfechos porque pese a la espera les tocaba comprar agua o alguna bebida en los negocios del Jardín. Una vez dentro, les tocó esperar casi una hora al mandatario.
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A los niños no se les permitía el ingreso. En el detrás de cámaras se vio como una señora que llegó con un menor de edad les pedía a los policías que se lo cuidaran, para ella poder entrar. Finalmente, entre miradas de los agentes y personal de seguridad de la Presidencia el pequeño terminó ingresando.
Tampoco se permitía el ingreso de sombrillas ni botellas de agua, por lo que hubo cajas y canecas dispuestas en el Orquideorama para dejarlos. No faltaron quienes a la salida se tomaron la tarea de buscar sus utensilios, pero otros los dejaron olvidados, como sucede siempre que hay eventos de este tipo.
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A otro ciudadano que llegó con una camiseta de una campaña política de años atrás, lo obligaron a quitársela, y uno más que llegó disfrazado de payaso, entró sin contratiempo. Un periodista tuvo que quedarse afuera porque se le olvidó el carné del medio, pese a que el equipo de Comunicaciones de Presidencia sabía que asistiría. Curiosidades de un evento de esta magnitud.
En la fila, un hombre alto de gafas, trigueño, con camiseta blanca y que decía ser docente universitario comentaba que su idea era poder hablar con “Petrosky” para plantearle algunas ideas académicas de cara a la Asamblea Constituyente que se busca impulsar.
La actividad inició con casi hora y media de retraso, y no tuvo representación de ninguna autoridad local, ni Alcaldía de Medellín ni Gobernación de Antioquia.
Una parodia de Colombia Tierra Querida con menciones al “Gobierno del Cambio”, y porros satirizando y haciendo burla de la gestión de las EPS ambientaron la llegada del mandatario. “Siempre la EPS engañaba a la gente con acetaminofén”, rezaba el coro.
Las canciones ni el discurso de casi 25 minutos de Petro suscitaron grandes aplausos. En el fondo, los adultos mayores que estaban allí solo esperaban recibir el aumento de su subsidio, que aliviará sus carencias económicas un poco más. Falta ver cómo será de ahora en adelante la atención que reciban cuando se enfermen gracias a rumbo que el presidente Petro le está dando a la salud del país.
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