El alcalde Federico Gutiérrez entregó un balance de lo que fue la jornada de protesta en la ciudad.
El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, entregó en la tarde de este martes el balance de lo que fue la jornada de manifestaciones convocadas por el Gobierno Nacional para presionar al Congreso para que apruebe las reformas promovidas por el presidente Petro.
Según el mandatario local, desde las 7:00 a.m. se instaló un Puesto de Mando Unificado “para garantizar el derecho a la protesta y el orden de la ciudad”.
Una vez terminada la movilización durante las primeras horas de la tarde, Gutiérrez dio un parte de tranquilidad y aseguró que la manifestación transcurrió “sin afectaciones graves” y que los cálculos oficiales estiman una participación de 6.000 personas en la capital antioqueña.
Sin embargo, el mandatario rechazó que los manifestantes dejaran consignas como “Estudiantes vamos a la lucha” en algunas paredes, por lo que ordenó borrarlas inmediatamente. “Aunque algunos aún piensan que manifestarse es rayar paredes, nosotros ya estamos volviendo a poner en orden la ciudad”, escribió en X.
A pesar de que algunos sindicatos, trabajadores, estudiantes y ciudadanos que apoyan al presidente Gustavo Petro salieron por su propia cuenta y convicciones a la calle, hubo denuncias y quejas de funcionarios y contratistas que recibieron presiones para asistir a las manifestaciones.
Una de ellas tuvo que ver con la dirección departamental del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, ICBF, pues ser filtró un correo en el que el director regional convocó a los contratistas a engrosar las calles.
“Cordial saludo respetados contratistas, mañana los espero en la marcha en los puntos de concentración definidos para Medellín, para los centros zonales de afuera vincularse en las de su área. Gracias”, se lee en la comunicación, que en la parte inferior aparece con la firma del director regional encargado, Edgar Quevedo Moreno.
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Luego de que se filtrara la información, el gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, cuestionó la convocatoria del director, señalando que en vez de estar metida en esas manifestaciones, la entidad debería enfocarse en resolver los problemas que tiene en el departamento, como la correcta ejecución de los contratos de alimentación.
“Al director encargado del Icbf en Antioquia le corresponde es poner a ‘marchar’ los contratos de alimentación para los 190.000 niños en el departamento. Esa tarea se tomó más tiempo de lo previsto y, a hoy, está incompleta”, criticó Rendón.
