En una entrevista exclusiva con la revista Times, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha dejado claro que su administración no descarta el uso de la fuerza militar estadounidense en caso de una posible invasión china a la isla de Taiwán. Ante la pregunta sobre este escenario, Biden enfatizó en las diferencias entre los despliegues del poder naval, aéreo y terrestre, pero no especificó cómo sería su avanzada militar ante una situación así.
La portavoz de la Cancillería de China, Mao Ning, respondió a los comentarios de Biden y afirmó en conferencia de prensa que “el verdadero status quo del Estrecho de Taiwán es que ambos lados de ese paso marítimo pertenecen a una sola China”, además agregó que ese territorio y sus espacios marítimos circundantes forman parte inalienable del territorio de China, y es asunto del pueblo chino el cómo resolver el problema de Taiwán.
Estas declaraciones, tanto la de Mao Ning como la del presidente estadounidense, llegan en un momento de alta tensión entre los dos países. El gigante asiático inició la semana pasada ejercicios militares alrededor de la isla, interpretados como un acto amenazante hacia el gobierno taiwanés.
El 22 de mayo y durante dos días consecutivos, China llevó a cabo ejercicios tanto marítimos como aéreos, manifestando así su descontento frente a las supuestas intenciones separatistas del gobierno recientemente elegido en Taiwán y luego de esto ha afirmado volver a rodear la isla si el gobierno taiwanés continúa con la misma política.
Las autoridades comunistas de China han calificado al presidente taiwanés, Lai Ching-te, como un “peligroso separatista”. Ching-te asumió su mandato el pasado lunes 20 de mayo, y en su discurso de investidura celebró la democracia de Taiwán e instó a China a “cesar su intimidación política y militar”.
En respuesta a estas amenazas, las autoridades taiwanesas movilizaron sus fuerzas marítimas, aéreas y terrestres para “defender la libertad ante las provocaciones irracionales que socavan la paz y la estabilidad regionales”, según declaró el Ministerio de Defensa de Taiwán. El Ejército de Taiwán desplegó tropas con misiles antibuque, preparándose para responder a los posibles ejercicios chinos alrededor de sus territorios.
Anteriormente, las autoridades chinas lanzaron duras amenazas a las unidades de defensa taiwanesas, advirtiendo que “las fuerzas de independencia de Taiwán acabarán con la cabeza rota y ensangrentada tras haber chocado contra... la tarea de China de completar la unificación”.
La isla de Taiwán ha sido gobernada separadamente desde 1949, y desde entonces China ha reclamado su soberanía sobre el territorio, amenazando constantemente con el uso de la fuerza para tomar su control.