Un año después del accidente en la mina de San José de Copiapó, Chile, dos de los 33 mineros rescatados estuvieron de visita en Colombia.
Claudio Yáñez y Pedro Cortez relataron, a través de una Twitcam, cómo cambió su vida después de permanecer 700 metros bajo tierra más de dos meses, y conocieron la experiencia de Raúl Amaya, el único minero que sobrevivió a la explosión de la mina El Silencio, en Amagá, Antioquia, sucedida en 1977.
Lo que vivieron estos tres hombres está separado por décadas y kilómetros de distancia pero sus testimonios comparten esperanza y valentía.
"Pasamos de ser anónimos a ser como estrellas de rock", dijo Pedro Cortez, aludiendo al interés que todavía despiertan en las personas que entre agosto y octubre de 2010 siguieron en vilo este drama que conmovió al mundo.
Claudio y Pedro confiesan que aún tienen problemas para dormir pero aseguran que aprovechan cada minuto junto a sus familias porque salir con vida, tras estar atrapados a 700 metros de profundidad, fue como nacer otra vez.
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