Medidas de parte de las autoridades de salud en Medellín y Antioquia, de coordinación de la redistribución de pacientes en diferentes instituciones entre hospitales y clínicas, han servido para mejorar la saturación de los servicios de urgencias del Hospital San Vicente de Paúl, reconoció ayer el jefe de Urgencias Infantiles, Juan Pablo Guerrero.
Pese a que todavía se presentan niveles de atención superiores al 200 por ciento de la capacidad del centro hospitalario, destacó que los requerimientos hayan disminuido con relación al tope de 500 por ciento que experimentaron la semana pasada, cuando el hospital se declaró en estado de emergencia.
Hasta ayer, según el reporte de Guerrero los reportes estaban en el orden del 250 por ciento en cuanto a urgencias de adultos y 220 por ciento en urgencias infantiles.
A la par con el trabajo que continúa de parte de las autoridades para ayudar a descongestionar las urgencias en el Hospital San Vicente de Paúl, el especialista reiteró la invitación a la comunidad a hacer buen uso del servicio.
“Si la persona tiene una dolencia menor, de baja complejidad, debe acudir al puesto de salud más cercano antes de solicitar atención en los grandes hospitales”, aconsejó.
Entre las causas del colapso la semana pasada, el director médico de San Vicente Fundación, Juan Guillermo Maya, señaló que muchos de los pacientes acuden allí porque ven las urgencias como una alternativa para agilizar la atención que no reciben con prontitud de parte de las EPS a las cuales se encuentran afiliados, lo cual se deriva en un mal uso de los recursos.