Gracias a la victoria 3-1 ante Inter de Porto Alegre, los dirigidos por Javier Gandolfi siguen en carrera por la clasificación a octavos de final.
En una nueva noche de Copa Libertadores en el Atanasio Girardot, cerca de 41 mil aficionados le cumplieron la cita a Atlético Nacional, que respondió en la cancha con un triunfo vital (3-1) frente a Internacional de Porto Alegre.
Aunque había cierto escepticismo por los altibajos del club antioqueño, el peso del rival y la importancia de lo que se estaba jugando, la fe no se perdía en la parcialidad local.
Internacional llegaba al Atanasio con dos puntos de ventaja sobre Nacional, pero en la interna del elenco verde sabían que un triunfo les permitía superar a los brasileños en la tabla de posiciones y los ponía de nuevo en carrera por la clasificación.
Conexión fuerte entre equipo e hinchada
Uno de los momentos para destacar, fue el recibimiento que cientos de aficionados le hicieron al bus de Atlético Nacional a su llegada al estadio. La comunión entre jugadores e hinchada no se perdía y había un buen presagio a pesar de la inclemente lluvia.
Comenzó el partido y las más de 40 mil almas en el máximo escenario de los antioqueños pedían un triunfo y le hacían saber a sus jugadores que no estaban solos. Nacional saltó a la cancha motivado y a buscar los tres puntos.
El júbilo y la euforia fueron evidentes tras el primer gol de Kevin Viveros al minuto 38. El atacante fue hacia un costado de la tribuna norte a celebrar junto con la parcialidad verde, en señal de gratitud y ratificando el vínculo entre ambas partes.
“Feliz y agradecido totalmente con la hinchada. Mis respetos, con lluvia y el estadio lleno no es fácil. Es un plus para nosotros jugar con el estadio lleno e intentamos darle alegrías a ellos siempre”, valoró el defensor William Tesillo al término del compromiso.
Nueva vida para Nacional
En la etapa complementaria, a los 55 minutos, Billy Arce amplió el marcador a favor de Nacional, otro momento especial de la noche, en el que el fútbol y la vida premiaban el sacrificio de un jugador que ha superado difíciles momentos personales y se ha ganado la confianza del cuerpo técnico con trabajo.
“Era importante para mi agarrar ritmo, recuperar la confianza. Tenia seis meses sin jugar. Fue fundamental el apoyo del cuerpo técnico y mis compañeros”, expresó el ecuatoriano que fue sustituido al 80’ por Dairon Asprilla.
El tanto del descuento de Internacional (minuto 80) ponía suspenso al partido, y la figura de David Ospina en el arco ‘Verdolaga’ se imponía ante los atacantes visitantes. Era el momento del capitán aparecer y cerrar su portería, y cumplió.
Atlético Nacional y su gente festejaron a rabiar el tercer y último gol de la noche (90+3’), obra de Kevin Viveros que firmaba su primer doblete en Copa Libertadores, que sirvió para confirmar que la tarea estaba hecha; los tres puntos logrados en su fortín y una nueva vida para la escuadra colombiana que se trepó al segundo lugar del Grupo F con seis puntos.
Tabla de posiciones fase de grupos Copa Libertadores
