El duelo entre el PSG y el Barcelona por la segunda jornada de la Champions League auguraba emociones, muchos goles y un gran espectáculo como solo el fútbol lo sabe hacer. Pero, lo que seguramente Luis Enrique no se esperaba, es que, lejos del partido, la atención se la robara una vez más Xana, su pequeña hija fallecida.
Lo que comenzó como un simple gesto de viejo colegaje por parte del Barça, al plasmar en las camisetas el logo de la fundación de Luis Enrique en memoria de su hija Xana, no se quedó ahí simplemente, sino que se convirtió en toda una campaña de solidaridad y amor en nombre de la pequeña.
La salida del camerino en el Estadio Olímpico de Montjuic del PSG y el Barça, fue más emotiva de lo que normalmente transmite la pasión del fútbol. Una vez alineados los equipos y dispuestos a cantar los himnos, algo llamó la atención: tanto los jugadores del PSG como los del Barça llevaban el logo de la Fundación Xana bajo sus dorsales.
El suceso también fue sorpresa para el equipo parisino y para Luis Enrique, que no se esperaba el gesto solidario por parte de su antiguo club. Sin embargo, no todo quedó ahí, pues luego el club español anunció que las camisetas de todos los jugadores serían donadas a la fundación para subastarlas y recoger fondos en memoria de la hija fallecida de Luis Enrique.
En efecto, todo lo recaudado se destinaría al programa Pulseras Blaugrana, que a su vez se donaría a la Fundación Xana, fundada por Luis Enrique en memoria de su hija. El PSG también subastará sus camisetas, con el logotipo de la fundación.
“Me gustaría agradecerle al FC Barcelona, el detalle que ha hecho con la donación de todas las camisetas para subastar y para conseguir recursos para la fundación Xana. Es un detalle muy bonito que le agradezco al presidente y a todo el club culé”, afirmó el técnico español, visiblemente conmovido por el gesto.
¿Cuál es el objetivo de la fundación Xana?
La fundación Xana nació para apoyar y acompañar a familias con niños, niñas y jóvenes, que sufren enfermedades graves, que requieren ayuda asistencial durante el proceso de su dolencia, un proceso que Luis Enrique vivió de primera mano al perder a su hija Xana con solo 9 años a causa de un osteosarcoma, un tipo de cáncer de huesos.
Recientemente, la fundación fue galardonada con el premio Sócrates en la ceremonia del Balón De Oro, debido al compromiso con la sociedad y la promoción de un mundo más equitativo e inclusivo. Esto no solo mantiene la memoria viva de Xana, sino que acompaña a sus padres y familiares a lidiar con la pérdida.