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Por EFE
La decimoctava etapa entre Pinzolo y Laghi di Cancano, en el Parque Nacional del Stelvio, de 207 kilómetros, será de cinco estrellas y se presume como una de las claves en este Giro de Italia. Una jornada sin respiro que asciende el Stelvio, a 2.758 metros de altitud.
Más de 200 kilómetros y solo cuatro subidas, pero el desnivel acumulado es de 5.400 metros, dato que impone respeto a los hombres del pelotón, que ya de inicio tendrán que ponerse a escalar la primera dificultad, el Passo Campo Carlo Magno (2a, 14,2 kms al 5,8%).
Después de 45 kilómetros será el turno para el Passo Castrin/Hofmahdjoch (1a, 8,6 kms al 8,9), puerto inédito de reciente apertura que conduce a Val d’Ultimo/Ultental.
Tras un largo y peligroso descenso se presenta el majestuoso Stelvio, el “Tourmalet” del Giro de Italia por su historia y leyenda, con su cima en el techo de la carrera, a 2.758 metros de altitud.
La subida al coloso transalpino se hará por la parte más exigente, una cuesta interminable de 24,8 km al 7,4 por ciento, con la mitad del recorrido por encima de 2.000 m.
Igualmente largo será el terreno de descenso, casi 25 km, que conducirá a la subida final a los Lagos Cancano con las “escaleras de Fraele” y sus 21 curvas cerradas perfectamente rítmicas en la ladera de la montaña. Una subida final de casi 9 km al 7 por ciento donde los favoritos tendrán mucho que decir.
El portugués Joao Almeida (Deceuninck) saldrá a defender la maglia rosa en un día que puede dar la medida de sus opciones reales de llegar a Milán como vencedor. Aventaja en 17 segundos al neerlandés Wilco Kelderman (Sunweb) y en 2.58 minutos al australiano Jai Hindley, del mismo equipo.
El luso se siente motivado por su gram rendimiento y por la labor que vienen desempeñando sus compañeros para arroparlo, sobre todo en la fracción de ayer en la que conservó el liderato sumando 15 jornadas seguidas.
El mejor colombiano en la general es el boyacense Éiner Rubio (Movistar), quien se ubica 61°, a 2:11.08. Por sus condiciones de escalador le favorece el terreno y por el tiempo que cede tendría libertad para buscar la victoria si se atrave a atacar desde lejos .