El ciclista holandés Dylan Groenewegen (Jumbo-Visma), causante de la terrible caída en el sprint final de la primera etapa de la Vuelta a Polonia de su compatriota Fabio Jakobsen (Deceunick-Quick Step), quien se encuentra en coma inducido, expresó a través de Twitter que “no puede describir” cuánto lo siente.
“Odio lo que pasó ayer. No puedo encontrar las palabras para describir cuánto lo siento por Fabio y otros que han sido arrojados o golpeados. Por el momento, la salud de Fabio es lo más importante. Pienso en él constantemente”, señaló Groenewegen en un mensaje en su perfil de la red social Twitter.
Jakobsen, que actualmente se encuentra hospitalizado en coma inducido en Katowice tras sufrir un traumatismo craneal muy grave y perder mucha sangre, fue sometido durante la madrugada del jueves a una cirugía facial y se encuentra estable.
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El ciclista del Deceunick-Quick Step chocó contra las vallas cuando buscaba un hueco en el sprint por la parte derecha de la carretera y fue cerrado por Groenewegen, que ganó el sprint pero fue descalificado por la organización de la Vuelta a Polonia, que decidió declarar a Jacobsen ganador de la etapa.
También resultó afectado por la caída el ciclista español Edu Prades, del Movistar, que sufrió una pequeña fractura transversal en la vértebra cervical C6 que le ha obligado a dejar la carrera y regresar a España este jueves.
Deceuninck confirmó denuncia contra Groenewegen
El director del Deceuninck-Quick Step, Patrick Lefevere, confirmó este jueves que denunciará a Groenewegen por provocar la grave caída de su compatriota Jakobsen.
“Deberían meterle en la cárcel”, declaró Lefevere después del esprint, donde Jakobsen se golpeó contra las vallas publicitarias tras un movimiento de Groenewegen.
Al dirigente del Deceuninck no se le ha pasado el enfado y este jueves, afirmó: “Confirmo esos mensajes en Twitter. Fue una acción muy fea de Groenewegen. Esas cosas no se hacen. Ya hemos interpuesto una denuncia ante la UCI y haremos lo mismo ante la policía de Polonia. No lo dejaremos pasar”, dijo a la agencia Belga.
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“He visto el esprint decenas de veces. No comprendo en absoluto la acción de Groenewegen. Un ciclista debe permanecer en su trayectoria”, añadió.
Jakobsen todavía sigue hospitalizado en Polonia. “Su estado es grave, afortunadamente no hay afectado ningún órgano vital, está estable pero las próximas horas son importantes. Van a intentar despertarle. Tiene rotos todos los huesos de la cara. Es realmente grave”, explicó el director.
Lefevere recibió el miércoles por la noche una llamada de Richard Plugge, director del equipo de Groenewegen, el Jumbo Visma.
“Le he dicho que pensaba que era valiente por su parte llamarme, pero también le he dicho que no entiendo la maniobra de Groenewegen”, desveló.
Lefevere organizó un vuelo privado para la familia de Fabio Jakobsen en dirección a Polonia, en el cual estará el psicólogo del equipo, Michael Verschaeve.
El equipo ha decidido seguir en la prueba pese a estas difíciles circunstancias.
