La Justicia rusa declaró este jueves culpable de posesión y contrabando de drogas a la baloncestista estadounidense Brittney Griner, quien había admitido su “error” al introducir aceite de cannabis en territorio ruso, pero también pidió clemencia durante la audiencia celebrada en el tribunal urbano de Jimki, en la región de Moscú.
“Cometí un error sin mala intención, confió que el veredicto no acabe arruinando mi vida”, dijo la famosa deportista en su última palabra en el juicio.
Luego agregó que “no conspiró ni planeó cometer el delito” que se le imputó.
La Fiscalía rusa pidió minutos antes 9,5 años de cárcel para Griner, detenida en febrero pasado en el aeropuerto moscovita de Sharemétievo luego de que funcionarios de aduanas hallaran en sus maletas aceite de cannabis.
“La acusación considera que la culpa de Brittney Griner ha sido probada completamente”, opinó el fiscal Nikolái Vlasenko.
La legislación rusa castiga con un máximo de diez años de cárcel el delito supuestamente cometido por Griner, que milita en el equipo ruso UMMC de Yekaterimburgo.
El fiscal también pidió que la campeona olímpica y mundial pague una multa de un millón de rublos (más de 16.000 dólares).
La defensa pidió su absolución o, en su defecto, la menor pena de cárcel posible. El Gobierno estadounidense considera que la detención de la baloncestista al cruzar la frontera con aceite de cannabis fue “errónea” y demanda su inmediata liberación, al igual que muchas estrellas de la NBA y WNBA.
El secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, propuso la pasada semana a su colega ruso, Serguéi Lavrov, el canje de Griner y Paul Whelan, condenado a 16 años por espionaje, por el “mercader de la muerte”, Viktor But, que sirve 25 años de cárcel en una prisión estadounidense.
Recientemente, la Casa Blanca rechazó la “contrapuesta” de Rusia, que quería incluir a un segundo preso ruso en el intercambio, el checheno Vadím Krásikov, según informó la CNN.