9:30 a.m., viernes 26 de noviembre. La maestra Teresita Gómez –referente del piano clásico en Colombia– visitó las instalaciones de la Sala de Artes Perfomativas que lleva su nombre en la Universidad de Antioquia, a pocos metros de la entrada norte.
Sentada en una silla de madera escuchó las explicaciones técnicas de los anfitriones: John Jairo Arboleda, rector del claustro, y Oscar Roldán-Alzate, jefe Departamento de Extensión Cultural. Sin aviso previo, la voz del tenor Diver Higuita colmó el espacio con las frases de “A mi manera”, de Paul Anka. De los camerinos salió un reducido grupo de amigos y alumnos de Gómez para convertir la visita en un festejo. La emoción los embargó a todos.
La antigua capilla de la U. de A. se transformó en un templo de la música y de las artes vivas. El proyecto –concebido antes de la pandemia– será abierto al público universitario y de la ciudad a mediados de febrero con un concierto de Teresita Gómez.
Las reparaciones de infraestructura –aprobadas por el Ministerio de Cultura por ser el campus un Bien de Interés Cultural de la Nación– costaron alrededor de $800 millones, contó Arboleda. La institución educativa gestiona $500 millones más para elementos de dotación y la compra de un piano de primer nivel. Una vez esté listo contará con un aforo de 136 personas.