Fiscalía acusó a dos policías por la muerte de Anderson Arboleda

Se les relaciona abuso de autoridad por acto arbitrario e injusto, en concurso heterogéneo con el delito de homicidio agravado.

Anderson Arboleda, de 19 años, murió en una clínica de Cali luego de una golpiza en la que su familia señala a la uniformados de la Policía. FOTO Cortesía

La Fiscalía General de la Nación acusó a los patrulleros de la Policía Leonardo Ardila Hernández y Rafael Francisco Polanco Arrieta, por presuntamente ser responsables de la golpiza y posterior muerte del joven Anderson Andrés Arboleda Montaño.

El hecho ocurrió a las 10:30 de la noche del 19 de mayo del año pasado, en Puerto Tejada, Cauca, días en los que el país pasaba por confinamiento a causa del covid-19.

De acuerdo con el ente investigador, los uniformados, adscritos al Cuadrante 6 de ese municipio, llegaron al barrio Santa Elena e increparon al joven en la puerta de su casa, en la que estaban su abuela y su tía, Magali Arboleda.

La razón con la que habrían arrimado los dos policías —en un hecho pasado por constantes agresiones, según la tía— es porque Arboleda, de 19 años, estaba incumpliendo el aislamiento preventivo obligatorio decretado por el Gobierno Nacional.

Un año y cuatro meses después, Deicy Jaramillo Rivera, directora especializada contra los Derechos Humanos, explicó que uno de los policías habría golpeado al joven en la cabeza y el brazo izquierdo con un bastón, mientras que el otro, supuestamente, le lanzó una sustancia que sería gas pimienta.

Esa versión es la que han denunciado en reiteradas ocasiones sus familiares, los cuales detallan que Anderson quedó mareado y con dolores de cabeza luego de los golpes, situación por la que lo llevaron a un centro médico de Popayán. Finalmente fue trasladado a Cali, donde murió el 21 de mayo de ese año producto de un trauma craneoencefálico severo.

Por esos hechos, un año y cuatro meses después, dicha Dirección Especializada de la Fiscalía acusó este lunes a los dos patrulleros, por los delitos de abuso de autoridad por acto arbitrario e injusto, en concurso heterogéneo con el delito de homicidio agravado.

EL COLOMBIANO conoció que tanto Ardila como Polanco se encuentran bajo la medida de privación de libertad domiciliaria, la cual les impuso un juez.

A su vez, la directora Jaramillo aclaró que las audiencias preparatorias de juicio en contra de los patrulleros comienzan a finales de noviembre que viene.