Andrés Felipe Ballesteros regresó a Colombia después de estar preso, injustamente, 8 años en el país africano de Tanzania. El nacional aterrizó en la tarde de este viernes y fue recibido por Migración Colombia: se reencontró con su familia.
“Me siento muy feliz. Primero que todo, le tenemos que dar gracias a Dios, a mi familia, al Gobierno de Colombia, a los medios de comunicación, que estuvieron ahí para que todo esto se pudiera dar”, manifestó el caleño luego de su arribo al país.
Ballesteros tocó suelo colombiano hacia la 1:36 de la tarde de este viernes. Después de realizar el procedimiento del reingreso al país, se reunió con su papá, mamá y hermano.
El colombiano se encontraba recluido en la cárcel Keko desde 2014. Para entonces Ballesteros tenía 28 años y decidió viajar a África para tomarse unas vacaciones. Momentos después del aterrizaje las autoridades de ese país se le acercaron y le hablaron en Suajili –idioma local–.
Posteriormente, lo enviaron a la cárcel bajo la sospecha de que, por su nacionalidad, era un personaje de los que han sido retratados en las narcoseries.
Ocho años después, y ahora con 36 años, el joven logró salir gracias a una recolecta en Twitter de 120 millones de pesos para pagar el costo de la fianza.
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La familia de Ballesteros relató que en el tiempo que estuvo preso tuvo que vivir en condiciones infrahumanas: dormía en el suelo y contrajo enfermedades como la malaria.
Este jueves 20 de octubre Ballesteros acudió al juzgado de Tanzania por última vez. Allí se le hizo todo el procedimiento para su retorno a la libertad. Antes de tomar el vuelo a Colombia pudo hablar un minuto con su hermano y notificarle que la tortura de estar 8 años presos había terminado.
“Es un día para mí inolvidable, es la felicidad, es el amor de Colombia entera”, puntualizó Guillermo Ballesteros, papá del caleño repatriado.