La premonición de Ligia Sánchez se hizo realidad. Lo que minutos antes le había advertido a sus tres hijas y dos nietos terminó siendo una preocupación para la familia que vio como *Jonathan fue alcanzado por un explosivo durante la noche de alborada en Medellín.
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Los hechos se presentaron en el barrio Guayabal La Colinita al suroccidente de la capital antioqueña pasadas las 12:15 de la noche cuando todos los integrantes de la familia, menos la prevenida abuela, se fueron a ver las luces y las explosiones que a esa hora estallaban en el cielo de Medellín.
Desde la calle, una persona detonó un tubo con pólvora y tras salir despedido el primer fogonazo, el artefacto se descontroló y el segundo impacto se dirigió hacia la terraza en la que se encontraban estas personas con tan mala suerte que afectó el cuello y el pecho de Jonathan, un joven de 19 años, quien trabaja en la Bayadera como comerciante.
“A quién le va a reclamar uno si la persona que manipulaba el artefacto poco le importó lo sucedido. Ahí uno se tiene que quedar callado porque no sabe quién es quién”, dijo Álvaro, primo de la víctima y quien lo acompañó hasta Policlínica para que recibiera atención médica.
Tras la emergencia, el afectado recibió los primeros auxilios en la casa con agua fría y luego trasladado al centro asistencia donde esperó más de dos hora para ser atendido.
“Hay gente muy inconsciente que no piensa en todas las personas que pueden resultar afectadas: los niños o personas mayores. ¿Quién va a pagar o cómo va a denunciar uno eso? Ojalá que la gente no siga con esas tradiciones tan malas”, agregó el familiar del lesionado.
En primera instancia, *Jonathan fue diagnosticado con quemaduras de segundo grado en su pecho y cuello. Así mismo, sufrió una herida en la garganta por el artefacto.
*Nombre cambiado
