En San Pedro de los Milagros, municipio del Norte antioqueño donde se presentó un atentado contra el comando de policía en la noche de este domingo, Día de las Madres, una familia vive un doble drama. A la muerte de uno de sus integrantes en medio de ese ataque armado se suma que lo empezaron a señalar como presunto integrante del Clan del Golfo. Y ahora se empeñan en limpiar su nombre y en evitar que se convierta en un falso positivo.
La historia comienza cuando a las 8:00 de la noche los habitantes del municipio empezaron a escuchar disparos que generaron terror. Después, según el informe preliminar de las autoridades, se supo que el hecho dejó por lo menos dos heridos (un civil y un policía) y un fallecido, de quien se dijo que, al parecer, era uno de los que estaba hostigando el comando.
Pero la otra parte de la historia la da a conocer la familia. Óscar Felipe Avendaño, abogado representante de la misma, indicó que en la mañana de este lunes los familiares lo contactaron para que los acompañara a hacer la identificación del cuerpo. En efecto, se trataba de su ser querido, quien es una persona de arraigo en el municipio y sobre quien el mismo abogado, en diálogo con EL COLOMBIANO, dio fe de que no tenía nada qué ver con grupos armados.