Las imágenes son aterradoras. Mientras dos hombres departían y una niña de seis años jugaba en la acera de un negocio en el sector Estadio, un hombre que descendió de una moto los atacó brutalmente y les apuntaba con un arma.
El hecho, aunque se hizo viral apenas ayer, ocurrió hace cinco días y quedó registrado en una cámara de seguridad que muestra cómo el delincuente llega apuntándoles a los dos hombres y en medio del forcejeo con uno de ellos se va en contra de la menor quien cae aparatosamente de espaldas antes de que otro hombre llegue afortunadamente a auxiliarla. Mientras tanto, los dos sujetos agredidos corren y en cámara se ve cómo el delincuente arrebata una manilla y una argolla de oro y se marcha corriendo hacia la moto.
Según testigos del hecho, el ladrón disparó en tres ocasiones su arma, pero se desconoce si efectivamente era un arma de fuego o traumática.
Las víctimas resultaron ser familiares de la concejala Lina Marcela García-Gañán, quien renunció en 2022 al Centro Democrático. La corporada precisó a través de su cuenta de Twitter que las víctimas fueron su papá y su hermano. Además aseguró que “las autoridades están investigando si fue hurto o es “algo asociado” a su actividad política.
Por fortuna nadie resultó herido de gravedad, aunque los testigos señalaron que la niña, quien tendría 6 años de edad, quedó con algunas contusiones en su cabeza y brazos. “Nadie debe pasar por esto, gracias a Dios todos están bien, la vida y la salud son los tesoros más preciados de cualquier ser humano”, escribió la concejala.
La violencia de este atraco no parece ser algo excepcional. En el último mes han ocurrido casos que conmocionaron a la ciudad y alimentaron la percepción de que la brutalidad y vulnerabilidad de los ciudadanos ante la sevicia de los delincuentes siguen aumentando.
A mediados de diciembre hubo una persecución de película entre El Poblado y La América para atrapar a dos ladrones que habían hurtado un reloj de $75 millones a un turista extranjero. Días después, en vísperas de Navidad, una víctima de un atraco decidió emprender la persecución de sus verdugos y en el camino causó un accidente múltiple que dejó tres lesionados.
También repercutió el caso de un fletero que murió en medio de un tiroteo con la policía, situación que puso en peligro a decenas de transeúntes en plena calle 10 de Guayabal. El asaltante había despojado de $60 millones a los ocupantes de un vehículo minutos antes.