El páramo más pequeño de Colombia: Las Baldías
Situado entre los 2.700 y 3.160 metros de altitud, el páramo presenta una precipitación anual que oscila entre 1.909 mm y 2.334 mm. Las cuencas que descienden hacia San Jerónimo y San Sebastián de Palmitas registran los mayores volúmenes de agua, mientras que las que fluyen hacia Bello y San Pedro de los Milagros terminan alimentando el río Medellín.
El ecosistema del Páramo de Las Baldías
A nivel ecológico, este ecosistema es un refugio de biodiversidad. Frailejones, musgos y especies como zorros y aves endémicas encuentran aquí su hogar. La conservación del Páramo de Las Baldías es clave no solo para el equilibrio ambiental, sino también para garantizar el recurso hídrico en la región.
Reseñan desde la Corporación Autónoma Regional del Centro de Antioquia, Corantioquia, que este lugar está asociado al soporte de actividades como “la regulación climática e hídrica, calidad del agua por retención de sedimentos, abastecimiento de agua para consumo, reservorios de diversidad de flora presentes en diferentes microclimas y microhábitats, nichos para la fauna, captura de carbono en el suelo y reducción de la amenaza asociada a inundaciones”.
Durante años este páramo ha tenido una problemática: el turismo irresponsable. Los habitantes del sector aseguran que hay muchas visitas que no están autorizadas, ya que la capacidad de carga, que representa el máximo nivel de personas que un espacio físico puede soportar sin que el recurso ambiental se deteriore, es mínima, casi que nula.
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“Las visitas son perjudiciales para su sostenibilidad, porque es pequeño y sus servicios ambientales son frágiles”, señaló un vocero del páramo para este diario en un artículo de 2020.