El hospital público departamental La María se prepara para dar en los próximos días la noticia de un nuevo hito en su historia: realizar un trasplante de riñón que le devuelva la esperanza de vida a un paciente que lo necesite. Este será su segundo gran logro reciente en materia de trasplantes, pues hace solo tres semanas, el 17 de marzo, la institución fue habilitada para prestar este servicio. Inicialmente, harán solo trasplantes renales, es decir, de riñones.
Con la autorización, que otorga la Secretaría Seccional de Salud de Antioquia, La María se convirtió en el primer hospital público del departamento en entrar al grupo de instituciones médicas (con otras cuatro) que pueden rescatar órganos de los donantes y hacer trasplantes a pacientes que lo requieren. A esto se suma que en Colombia son el segundo hospital público autorizado para tal fin, pero el primero público no universitario.
De acuerdo con el médico Héctor Jaime Garro, gerente del hospital, un trabajo de casi dos años permitió demostrar que La María cumplía los requisitos para estos procesos complejos que requieren un personal altamente especializado. Solo seis días después de que su programa de trasplantes fuera habilitado (el 23 de marzo) rescataron dos riñones y un hígado de un paciente fallecido. En el caso de los rescates, pueden hacerlo con cualquier órgano.
Aunque ese 23 de marzo el hígado no tuvo las características anatómicas para ser trasplantado; los dos riñones sí fueron aptos y ese mismo día los recibieron dos pacientes, por medio de una cirugía en la IPS Universitaria, una de las entidades de salud habilitadas en Antioquia para estos procedimientos. Las otras son el Hospital San Vicente Fundación, el Pablo Tobón Uribe y la Clínica Somer.
Trabajo por rotación
Las cinco instituciones trabajan de forma coordinada y se rotan por semanas para hacer los trasplantes. Cuando una clínica u hospital tiene un potencial donante, debe informar a la Secretaría de Salud de Antioquia para que la entidad de turno acompañe y haga el trasplante.
El proceso de rescate, explicó Garro, debe contar con el mayor rigor científico y técnico para que el órgano sea viable. Posteriormente, se establece con cuál de los pacientes en lista de espera es compatible. En ocasiones, el órgano deberá ser trasladado a la entidad de salud donde se encuentre el paciente, lo que se hace bajo protocolos estrictos de preservación.
Tras extraer los órganos, el trasplante debe hacerse lo más rápido posible, pues el tiempo corre en contra y este puede dañarse y perderse. Cada minuto que pasa aumenta este riesgo. Por ello, las IPS trabajan de forma coordinada y en constante comunicación, pues las listas de espera de personas que buscan un trasplante es amplia.
En La María esta lista todavía está en construcción, pues primero debían contar con la habilitación del servicio para consolidar los casos de pacientes que necesitan trasplantes.
Panorama en Antioquia
Los rescates de órganos pueden hacerse en pacientes fallecidos con parada cardiaca o muerte encefálica demostrada, así como en donantes vivos, lo que suele suceder entre familiares cuyos órganos son compatibles.
En el caso de La María, por el momento, están haciendo rescates en pacientes con muerte encefálica. Están a la espera de una máquina que les permita hacer el procedimiento en el caso de la parada cardiaca y, en un poco tiempo empezar también en pacientes vivos.
El gerente Garro resaltó que entre los trasplantes comunes están el de córnea, riñones, hígado, pulmones, corazón, hueso y piel. También contó que en el departamento la Secretaría de Salud lidera, en cabeza del doctor Rodrigo Pimienta, la Regional 2 de la Red de Donación y Trasplantes (compuesta por Antioquia, Córdoba, Chocó, Caldas y San Andrés, Providencia y Santa Catalina).
Según información de esta dependencia, entre 2021 y el transcurso de 2022 se han hecho en Antioquia 320 trasplantes de órganos, de los cuales 199 son de riñón, 74 de hígado, 21 de corazón, 16 de pulmones, 8 de riñón-páncreas y 2 de riñón-hígado (los más complejos de todos). En este periodo, 267 de los rescates de órganos fue en pacientes cadavéricos y 53 en donantes vivos. Por otro lado, se hicieron 781 trasplantes de córnea en todos los departamentos que conforman la regional.
Asimismo, con corte a este 6 de abril, se reportaron en esta regional 436 pacientes en lista de espera para acceder a un trasplante de riñón (359 casos), hígado (20), corazón (6), pulmones (12), riñón-páncreas (3) y córnea (36).
Finalmente, Garro reiteró el llamado a la comunidad a que haga en vida una manifestación expresa de que quiere donar sus órganos al fallecer, pues aunque todos los colombianos, por legislación vigente, son potenciales donantes, si hay una negativa expresa en vida o de la familia tras la muerte, los órganos no se pueden extraer con este fin.
