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Antioquia | PUBLICADO EL 24 febrero 2023

La telaraña de burocracia del senador Trujillo en Antioquia para las elecciones

En la elección de consejo directivo de Corantioquia, el senador Carlos Trujillo, con Julián Bedoya, desbarató acuerdos entre alcaldes para ganar influencia en la región a través de la corporación.

  • El senador Carlos Andrés Trujillo salió de la dirección del Partido Conservador el pasado 15 de febrero. Foto: Cortesía
    El senador Carlos Andrés Trujillo salió de la dirección del Partido Conservador el pasado 15 de febrero. Foto: Cortesía
  • El senador Carlos Andrés Trujillo salió de la dirección del Partido Conservador el pasado 15 de febrero. Foto: Cortesía
    El senador Carlos Andrés Trujillo salió de la dirección del Partido Conservador el pasado 15 de febrero. Foto: Cortesía
La telaraña de burocracia del senador Trujillo en Antioquia para las elecciones

En 2004, Carlos Andrés Trujillo ganó sus primeras elecciones: se convirtió en concejal de Itagüí. La fecha es importante porque significa que hace menos de 20 años comenzó su carrera electoral y hoy, no solo ha logrado amasar una clientela política polémica y nutrida, sino que también es el senador más votado de Antioquia. ¿Cómo lo ha logrado?

Trujillo cada vez tiene más tentáculos en la política (ver gráfico). En Itagüí, por ejemplo, se da un caso particular: su primo, su hermana, su sobrina, la sobrina de su esposa, y así amigos y familiares, son funcionarios de la Alcaldía. Ahora, quiere ir por la Gobernación de Antioquia con su aliado, el liberal Julián Bedoya, investigado por presunta falsificación de su diploma de abogado.

La muestra más reciente del apetito de poder del senador Trujillo tuvo lugar ayer, cuando junto a sus aliados, Julián Bedoya y el senador John Jairo Roldán, lograron erosionar a última hora el acuerdo que tenían 80 alcaldes antioqueños y ganar así dos puestos en la mesa directiva de Corantioquia. Un bastión que, sin duda, da muchos réditos en el propósito de tomarse el poder del departamento.

La semana pasada lo tumbaron de la presidencia del Partido Conservador, pero como se dice popularmente, cayó parado, pues logró que le prometieran ser el presidente del Senado en 2024. Cuando se enteró del golpe de Estado que le iban a dar en la colectividad azul, corrió a la Casa de Nariño, allí lo vieron con la secretaria privada de Gustavo Petro, Laura Sarabia. Para el presidente, Trujillo es útil, pues apoya todas sus reformas. Los que no han quedado tan contentos son sus colegas de bancada, que consideran que el antioqueño suele quedarse con la mejor parte de la mermelada.

Trujillo está construyendo una telaraña de poder para poner sus fichas en concejos, alcaldías y asamblea en las elecciones de octubre. Justo este fue el mensaje que compartió el exsenador Bedoya hace poco más de 15 días. Casi embriagado por la confianza que aflora en quien es anfitrión, sostuvo en un polémico almuerzo para periodistas: “Hemos tomado la decisión de la vida: fusionar, en un solo equipo, los dos grupos políticos más grandes de Antioquia”.

De hecho, Trujillo tuvo la oportunidad de medir de nuevo la fuerza en las pasadas elecciones a Congreso. En marzo fue reelegido como senador con 159.810 votos, conquistando 99.101 sufragios en Antioquia, dos terceras partes de su cosecha.

Pero no solo Trujillo consiguió buenos resultados. Un apadrinado suyo pasó de ser un concejal itagüiseño a quedar entre los más votados a la Cámara de Representantes por Antioquia. Hablamos de Daniel Restrepo, integrante del equipo base de Trujillo en el departamento, quien obtuvo la nada despreciable suma de 78.187 sufragios, cuando el capital que sumó para llegar al Concejo fue de solo 3.792 apoyos.

Pero no solo Restrepo ha sumado votos al competir en fórmula con el senador: el diputado Jaime Cano y el concejal Lucas Cañas, quienes completan la tripleta que vela por sus intereses en la región, han registrado pasos políticos importantes de la mano de Trujillo.

Cano se convirtió en diputado con 43.928 votos y, aunque no fue el más votado a la Asamblea, se codeó con los dos que lideraron la elección: Luis Carlos Ochoa, liberal que obtuvo 50.519 votos, y Roque Eugenio Arismendy, integrante del Centro Democrático que sacó 45.503 votos. Cañas podría ser la excepción en lo que a resultados electores se refiere: en principio se quemó en su aspiración al Concejo de Medellín con 7.931 votos —muy por debajo de Juan Ramón Jiménez, el más votado por los conservadores con 14.472 apoyos—, pero al suplir la vacancia de una curul conservadora comenzó un vertiginoso ascenso que sin duda responde al apadrinamiento de Trujillo.

Ya en la corporación, Cañas asumió como presidente de la mesa directiva en alianza con la coalición del alcalde Daniel Quintero. Allí comenzó a evidenciarse otro vínculo que refleja las buenas migas que hay entre la dupla Trujillo - Bedoya y el mandatario local. El concejal ahora es precandidato a la Alcaldía por los conservadores y sería clave para asegurar una posible alianza que permita darle continuidad al actual gobierno distrital.

Itagüí y entes de control

Es necesario volver la vista a Itagüí para reseñar el poder que hoy tiene Trujillo. Allí cuenta con una administración completamente favorable, en cabeza del alcalde José Fernando Escobar. El Ejecutivo está prácticamente bajo su poder a través de sus cuotas burocráticas: familiares, amigos entrañables y personas que han integrado su proyecto político desde que fue alcalde del mismo municipio ostentan cargos directivos y de segundo orden.

Un primo del senador se desempeña como director de Desarrollo Económico; en Hacienda tienen influencia su hermana Natalia Trujillo y una sobrina de Patricia Ramírez, la esposa del congresista; en Seguridad está Rafael Andrés Otálvaro, amigo de Trujillo; y en la Secretaría General estarían ubicadas las cuotas del diputado Cano. Los despachos de Familia, Comunicaciones y hasta la Personería también tienen injerencia del senador.

De hecho es en este frente en el que cobra importancia la amistad con Cañas. Resulta que la compañera sentimental del concejal, luego de un proceso minado por los cuestionamientos, terminó convirtiéndose en la contralora de Itagüí. Hablamos de Yésica Lozano, quien sostuvo en 2021 que su vínculo con Cañas —y por tanto con Trujillo— “no tendría por qué interferir en su trabajo y la independencia del ente” que liderará hasta 2025.

Pero el dominio en este municipio y sus órganos de control se ha extrapolado. Trujillo también tiene influencia en la Contraloría de Antioquia, a través de Enedith del Carmen González, quien saltó del órgano de control fiscal de Itagüí al principal de este tipo en el departamento. La elección estuvo empañada por señalamientos y recusaciones en contra de Cano, presidente de la Asamblea en 2021, por su evidente cercanía con el senador Trujillo. Además, otro integrante de la terna aprobada en principio por los diputados también era oriundo de Itagüí.

Ya en la Contraloría de Antioquia, una Auditoría Financiera y de Gestión de la República reveló que a Andrea Bedoya, hermana del exsenador Bedoya, le ajustaron el perfil para tres cargos pese a no cumplir plenamente con los requisitos. El último que ocupó fue el de subcontralora, dignidad que abandonó en octubre pasado. El mencionado informe y el venidero anuncio de la alianza Trujillo-Bedoya para la Gobernación resultó en su salida del cargo. Esto, dicen fuentes al interior del ente de control, no ha impactado en nada el poderío burocrático que allí tiene la dupla.

Cuotas en Medellín

Volvamos a Bedoya, cacique político de La Estrella y quien tiene hegemonía total en la alcaldía de Juan Sebastián Abad. Este en compañía del senador Juan Diego Echavarría, heredero de su curul en el Congreso con 93.924 votos, le llenó plazas a Gustavo Petro durante su campaña a la Presidencia a mitad del año pasado. Entre Bedoya y Echavarría se fortalece la red de poder anunciada en días pasados. A esta se suma la actual representante María Eugenia Lopera, que renunció a la Asamblea para competir bajo su bendición, en fórmula con Echavarría, por una curul en el Congreso. En su primera aspiración se convirtió en una de las representantes más votadas del país, al obtener 86.330 votos.

Este es el grupo base del exsenador liberal y ahora en conjunto con Restrepo, Cano y Cañas son las caras visibles de la alianza Trujillo-Bedoya que va por la Gobernación. Buscan ganar caudal en otras localidades —caso del centro del departamento con el pulso por Corantioquia— distintas a Itagüí, La Estrella, Sabaneta, Girardota e incluso Envigado, donde tienen cierto margen de acción. En Medellín, sin embargo, ya gozan de una buena aplanadora burocrática. Las cuotas visibles de esta dupla, por lo menos en lo que se refiere a cargos directivos, llega a seis.

Uno de los despachos claves que manejan es el de Infraestructura. Luisa Fernanda Gómez, secretaria que reemplazó a Natalia Urrego, llegó al cargo en pleno cierre de mandato como recomendada de esta dupla. El reacomodo se debe a que ‘el matrimonio’ entre el exalcalde de Itagüí León Mario Bedoya y Trujillo se disolvió, por lo que este último habría cobrado el desencuentro dejando por fuera a Urrego, quien era cuota de León Mario.

Carlos Alberto Gutiérrez, quien se desempeña como subsecretario de Gobierno Local y Convivencia, también habría llegado al gabinete de Quintero mediante la recomendación del exalcalde Bedoya, pero este se mantiene en el cargo. Dicen al interior de la entidad que lo ha logrado porque rompió relaciones con su anterior padrino para rendirle cuentas por completo al senador Trujillo.

Por otro lado, es bien sabido que la Secretaría de Ambiente le fue entregada a Cañas. Allí ubicaron como líder a Vanesa Álvarez Restrepo, quien pasó de asesorar a Cañas en su unidad de trabajo en el Concejo a convertirse en la ordenadora del gasto de esta dependencia. El concejal conservador Juan Ramón Jiménez también tendría cuotas en varias subsecretarías, como la de Protección y Bienestar Animal, además de la contratación en el centro animal La Perla.

Pero la repartija burocrática también alcanza para otras entidades: es el caso de Metrosalud, empresa que ha estado sumergida en una crisis financiera y de infraestructura durante esta administración. Trujillo y Bedoya habrían intercedido por el nombramiento de Valentina Sosa Carvajal como gerente. Y al interior de Metroplús, sistema de transporte que impacta a Medellín, Envigado e Itagüí, se habla de la influencia del senador conservador a través de su gerente general Jaime Alberto Garzón y del director de la oficina de Control Interno, Carlos Arturo Betancur, también exalcalde de Itagüí.

El otro vínculo llamativo, aunque no responde a cuotas burocráticas, reseña una amistad sólida entre Trujillo y Rodolfo Correa, exsecretario de Agricultura de Antioquia que ahora es candidato a la Alcaldía de Medellín. Esta amistad surgió al inicio de la administración de Aníbal Gaviria y su relación también daría pistas sobre la supuesta cercanía política entre Correa y el alcalde Quintero. Hay otros entes, de impacto incluso regional, a los que han llegado personas provenientes de Itagüí: Vanesa Montañez, que está como delegada de la Defensoría del Pueblo, y se habla de próximos nombramientos en la Aerocivil.

Infográfico

Conquistar la Gobernación

Donde no son tan claras las cuotas, por lo menos en cargos directivos, es en la Gobernación de Antioquia. Un desencuentro entre Aníbal Gaviria y Trujillo en el inicio del mandato le puso fin a esa alianza. El asunto estuvo relacionado con la elección de Cano como presidente de la mesa directiva de la Asamblea para la vigencia 2021. Desde entonces la relación comenzó a enfriarse y habría tenido su fin con el aterrizaje del senador Trujillo en el gobierno de Quintero.

Es justo esta tripleta la que actualmente estaría repensando su estrategia con miras a conquistar la Gobernación, luego del ‘golpe de Estado’ que le dieron a Trujillo arrebatándole la dirección del Partido Conservador para entregársela al senador Efraín Cepeda. Lo que se esperaba es que Trujillo aprobara el aval para la candidatura de Bedoya en Antioquia o, en su defecto, impulsara al exsecretario Esteban Restrepo, del grupo del alcalde Quintero. Pero cuentan fuentes conservadoras que Cepeda dejó muy claro que será él quien entregará los avales.

Esta turbulencia al interior del partido parece no haber causado mella en Trujillo y su equipo. Es bien sabido que, de la mano de Bedoya, avanzan los coqueteos con el Pacto Histórico de Petro para que se sume a su plan regional. Además, ya hemos visto que su capital electoral y burocrático es robusto y puede sobreponerse a cualquier embate. Solo en votos, sin contar la maquinaria, las fórmulas a Congreso Trujillo-Restrepo y Echavarría-Lopera arrastraron más de 400.000 votos.

El monto es apenas la mitad de lo que sacó Gaviria en 2020 cuando resultó elegido como gobernador, pero se espera que se sumen otros sectores. Lo otro es que no hay que especular mucho para tener claro que toda la burocracia que actualmente le rinde cuentas a esta dupla tendrá que salir a buscar votos para mantener sus puestos. Hasta Luis Pérez podría terminar haciendo llave con quien ahora se perfila como el gamonal del departamento.

Contexto de la Noticia

Para saber más Familiares y amigos en Itagüí

Los funcionarios que han pasado por la Alcaldía y son cercanos a Trujillo: Daniel González (primo) en Desarrollo Económico; Eliana Arias (sobrina de Patricia Ramírez, esposa de Trujillo) y Natalia Trujillo (hermana de Trujillo) en Hacienda; Gloria Chávez (esposa de un hijo del diputado Cano) en Secretaría General; Rafael Otálvaro (amigo de Trujillo) en Seguridad; Leidy Castaño (esposa de Andrés López, asesor de Trujillo) en Familia; Diana Cano (hermana del diputado Cano) es subgerente del Hospital Sur; Luz Henao (ha trabajado con Trujillo) y Karen González (sobrina de Trujillo) en Comunicaciones.

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